Se acabó la 'buena vida' para los directivos de Nissan. A partir de ahora, tendrán que reducir drásticamente sus gastos en viajes, comidas y eventos para controlar cada yen, según las directrices transmitidas por la multinacional en vísperas de anunciar los afectados por el recorte de plantilla de 12.500 empleos.
La compañía automovilística Nissan ha ordenado a sus directivos que reduzcan sus gastos no esenciales para "conservar cada yen", a medida que el fabricante japonés lidia con la caída de las ventas y de sus beneficios, según han informado fuentes internas de la compañía consultadas por la agencia Reuters.
Las nuevas órdenes a los directivos de la marca incluyen que no gasten en viajes "innecesarios" y que, a las reuniones a las que asistían tres o cuatro personas, ahora solo podrá asistir un representante de Nissan. Por su parte, otras reuniones o cenas se cancelarán o serán realizadas por videoconferencia.
Caída de las ventas de Nissan
Esta medida estará en marcha al menos hasta finales del mes de marzo, cuando acabará el año fiscal con la contabilidad japonesa y, probablemente, continuará durante el resto del 2020, tal como han relatado las mismas fuentes.
Estos recortes del gasto se suman a la decisión de Nissan de ordenar un permiso de dos días para los empleados de Estados Unidos (EEUU), del 2 al 3 de enero. También ha decretado una prohibición de viajes para el personal en EEUU, donde las ventas se han visto particularmente afectadas. En Europa, las matriculaciones de Nissan caen a un ritmo del 20%.
La congelación del gasto no esencial es "cada vez más un 'modus operandi' en Nissan a nivel mundial", han indicado las mismas fuentes, que han agregado que "la casa no está en llamas, pero hay algo latente", aunque han indicado que la firma tiene suficientes recursos en efectivo.
La planta de Barcelona, a la expectativa
Nissan se enuentra en pleno proceso de concreción del recorte de 12.500 puestos de trabajo, que ha generado ya convulsiones internas con la dimisión del directivo que tenía que poner en marcha los despidos. El recorte de plantilla como respuesta al drástico descenso de los beneficios de Nissan ha generado alarma en la plantilla de la planta de Barcelona, que a partir de enero trabajará a un 26% de su capacidad máxima.
