El coronavirus extiende sus efectos económicos mucho más allá de China. El mismo día en el que se anunciaba la cancelación del Mobile World Congress de Barcelona por el temor de algunas empresas al contagio, el proveedor del automóvil Magneti Marelli comunicó al comité de empresa la puesta en marcha de un expediente de regulación de empleo (ERE) temporal en una fábrica de Cataluña que tiene como causa inicial también el coronavirus.
La dirección de Magneti Marelli ha anunciado su intención de aplicar un ERE temporal (ERTE) en la fábrica de Barberà del Vallès (Barcelona) para toda la plantilla, formada por más de 400 empleados. El motivo argumentado por la compañía como causa de esta medida es la falta de suministro de algunas piezas para componentes electrónicos que proceden de una factoría situada en la provincia de Hubei, donde se encuentra Wuhan, que está paralizada desde final de enero.
Rechazo sindical
El parón de las fábricas de automoción y de los proveedores de China ha ido extendiendo sus efectos a otras áreas como Corea del Sur y Japón, donde se han producido paralizaciones de la producción por falta de componentes suministrados desde China.
El sindicato CCOO ha mostrado su rechazo al ERE anunciado, cuya presentación formal tendrá lugar la semana que viene, y ha instado a la compañía a aprovechar las medidas de flexibilidad interna para adaptar la producción a las ventas hasta que se agoten antes de enviar al paro a los más de 400 trabajadores.
