Industria

Pacto de caballeros de Blume con VW y Porsche

El consejo del Grupo VW alarga 5 años el contrato de Oliver Blume como presidente pero lo releva al frente de Porsche por el impulsor del Cayenne

Oliver Blume ante los inversores / VW

Oliver Blume ante los inversores / VW

Toni Fuentes

21.10.2025 17:57h

5 min

Oliver Blume, el ejecutivo que llevó a Porsche a dar un salto y a entrar en la bolsa, cede el volante de la marca deportiva. Lo hace en el marco de un pacto de caballeros con las familias Porsche y Piëch para prorrogar su contrato al frente de Volkswagen que ha sentado bien en la bolsa. Desde el anuncio del cambio, la cotización de las acciones de Volkswagen y Porsche ha subido, con moderación, tras satisfacer la compañía una demanda insistente de los accionistas y los inversores.


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El consejo de administración de Volkswagen ha renovado su mandato como consejero delegado del grupo cinco años más, hasta 2030, confiándole la tarea de guiar al mayor fabricante automovilístico europeo en la década más decisiva de su historia. A cambio, Blume cede las riendas de Porsche a un viejo conocido.

A partir del 1 de enero de 2026, Michael Leiters, ingeniero alemán con pedigrí en Ferrari, McLaren y la propia Porsche, asumirá el liderazgo de la marca del 911. Su nombramiento marca una nueva era para el fabricante de deportivos, en un contexto de márgenes en caída, turbulencias estratégicas y presión de los mercados. “He tenido el privilegio de desarrollar una gran empresa con un equipo fantástico. Ahora es el momento de dar paso a una nueva generación”, declaró Blume.

La reacción de la bolsa ha sido positiva, especialmente en el caso de Porsche, cuyas acciones suben casi un 7% desde el anuncio del relevo. Las acciones de Volkswagen también se revalorizan alrededor del 2%.

Solución salomónica

El movimiento tiene una lectura doble. Por un lado, refuerza la posición de Blume como hombre fuerte del Grupo Volkswagen, al prolongar su mandato en un momento en el que la compañía encara la electrificación, la digitalización y la reestructuración interna más compleja desde el Dieselgate. Por otro, satisface a los inversores que reclamaban que el directivo dejara de “dividir su atención” entre el grupo y Porsche, cuya cotización ha sufrido una caída del 50 % desde su salida a bolsa en 2022.

El presidente del consejo de administración de Volkswagen, Hans Dieter Pötsch, justificó la decisión con un mensaje de confianza: “En un entorno complejo, el señor Blume ha demostrado su capacidad para desarrollar la estrategia y las operaciones del grupo. Con él al timón, Volkswagen afrontará con éxito los retos de los próximos años.”

Porsche inicia una travesía exigente

Oliver Blume deja Porsche tras diez años de gestión y récords. Bajo su liderazgo, la marca no sólo multiplicó su rentabilidad, sino que protagonizó una de las salidas a bolsa más exitosas de Europa y expandió su gama con modelos como el Taycan, el Macan eléctrico o el 911 híbrido.

Pero la coyuntura ha cambiado. La desaceleración en China —donde las ventas cayeron un 26 % en los tres primeros trimestres de 2025—, los aranceles estadounidenses y la revisión de la estrategia eléctrica han empañado el brillo de la firma, que seporsche ha quedado rezagada en el ranking de reantabilidad del grupo. El margen operativo, que en 2022 alcanzaba el 18 %, ha caído a un modesto 2 % este año, mientras las acciones de Porsche abandonaban el índice DAX, símbolo de la élite empresarial alemana.

En septiembre, la dirección de Porsche dio un giro estratégico: aparcó el plan de electrificación total para centrarse en una gama de motores híbridos y térmicos de altas prestaciones, más alineada con su identidad deportiva y la demanda real del mercado. La decisión obligó a Volkswagen a asumir un impacto contable de 5.100 millones de euros, pero frenó el riesgo de una deriva tecnológica costosa y poco rentable.

El regreso del impulsor del Cayenne

Para encabezar esta nueva etapa, el consejo de administración de Porsche ha elegido a un perfil con ADN propio de la casa: Michael Leiters, de 54 años, ingeniero especializado en SUV y chasis deportivos, que ya estuvo 13 años en Porsche y fue uno de los impulsores del Cayenne, el modelo que salvó la marca a principios de los 2000.

Leiters regresa con un currículum de alto octanaje: director técnico de Ferrari durante ocho años y CEO de McLaren Automotive hasta 2024. Su experiencia en marcas de lujo, su conocimiento de los SUV de alto rendimiento y su reputación como “gestor de crisis” lo convierten en el candidato idóneo para estabilizar a Porsche.

Wolfgang Porsche dio su aprobación al directivo que tiene que remontar el terreno perdido por Porsche. “Blume ha guiado a Porsche con éxito en tiempos difíciles. Ahora confiamos en Michael Leiters para afrontar los nuevos desafíos con la misma determinación.”

Blume se centra en el grupo

El cambio simboliza una redistribución de poder dentro del Grupo Volkswagen. Blume se concentrará en consolidar el conglomerado que integra 12 marcas —desde VW y Audi hasta Lamborghini o Skoda, Seat y Cupra— y en acelerar los programas de electrificación, software y reducción de costes. El cambio era una demanda de los accionistas del grupo, incluyendo los poderosos representantes del sindicato IG Metall.

Su prioridad inmediata será recuperar la rentabilidad del negocio eléctrico, mejorar la eficiencia de las plataformas MEB y PPE y redefinir la arquitectura industrial del grupo. Su otro gran reto: recomponer la confianza de los mercados, que todavía perciben a Volkswagen como un gigante pesado frente a rivales más ágiles como Tesla o BYD. “Estamos reestructurando la compañía y ampliando nuestra estrategia de producto. Porsche y el resto del grupo están sólidamente posicionados para el futuro”, afirmó Blume.

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