La irrupción de Xiaomi en el universo de los vehículos eléctricos ya no es una anécdota. Con el lanzamiento del Xiaomi YU7, su primer SUV, la marca china de electrónica pone en marcha su segunda embestida contra Tesla, esta vez atacando el corazón de su oferta, el Model Y.
Desde el primer vistazo, el Xiaomi YU7 no se esconde. Hereda el lenguaje visual del SU7 —su exitoso primer modelo, una berlina deportiva que ya ha superado las 258.000 unidades vendidas en un año— pero lo adapta al formato SUV con elegancia y agresividad. Bajo el lema “surcar el viento”, el YU7 ha sido concebido para rivalizar directamente con los líderes del segmento, elevando la ambición de la compañía a niveles inéditos.
Prestaciones del Xiaomi YU7
En una presentación más cercana al estilo de Apple que al de un fabricante de coches tradicional, Lei Jun, CEO de Xiaomi, evitó hablar de precios —lo hará en julio—, pero no eludió las comparaciones: “El Model Y de Tesla tiene un precio de partida de 263.500 yuanes (unos 36.500 dólares). Estas configuraciones del YU7 deberían estar entre 60.000 y 70.000 yuanes por encima”. Lo dijo mientras desgranaba una lista de prestaciones que hacen palidecer incluso a rivales más caros.
Con una autonomía máxima de 835 kilómetros y una aceleración de 0 a 100 km/h en apenas 3,23 segundos, el YU7 juega en la liga de los SUV de alto rendimiento. Su versión Max, con tracción total y batería de 101,7 kWh, roza los 770 km de autonomía. Datos que, sobre el papel, lo sitúan por encima del nuevo Model Y y del Mercedes EQE SUV.
Pero si hay algo que distingue a este SUV no es solo su motor —el HyperEngine V6s Plus— sino la apuesta radical por la digitalización. La “pantalla panorámica HyperVision” proyecta información en el parabrisas con claridad quirúrgica, y se apoya en un sistema de triple mini LED de 1,1 metros. Xiaomi promete que será tan visible bajo el sol como una pantalla Retina. Todo un manifiesto de lo que la marca entiende por lujo: no cuero y madera, sino software, chips y pantallas.

Nuevo Xiaomi YU7
Rectificación sobre la conducción autónoma
El YU7 no es una adaptación improvisada del SU7. A nivel técnico, ha sido diseñado desde cero para cumplir con las exigencias de un SUV de gama alta: suspensión neumática de doble cámara, frenos Brembo, configuración de doble motor, chasis inteligente adaptativo… Xiaomi ha volcado aquí no solo su músculo en electrónica de consumo, sino su visión sobre cómo deberían ser los coches inteligentes del futuro.
Sin embargo, el camino de Xiaomi en el automóvil no está exento de curvas. Un accidente mortal con un SU7 en modo de asistencia a la conducción desató críticas por una publicidad “incompleta”, obligando a la marca a disculparse públicamente. Aunque la compañía asegura que ha reforzado sus sistemas de seguridad y frenado cuádruple, la confianza del consumidor se prueba kilómetro a kilómetro.
Clon, rival y espejo de Tesla
¿Es el YU7 un clon de Tesla? En muchos sentidos, sí. Desde su enfoque de producto hasta la manera en que se presenta al público, Xiaomi emula a la compañía de Elon Musk. Pero la imitación no es literal ni superficial: es estratégica. Mientras Tesla sufre frente a lso competidores, Xiaomi aprovecha su ecosistema digital, su base de usuarios leales y su agilidad industrial para colarse por el flanco más débil de su competidor: la saturación de gama y la percepción de estancamiento.
Con el mercado chino como campo de batalla —el más exigente del mundo en movilidad eléctrica— y Europa como próximo objetivo, Xiaomi ya no quiere ser solo una marca de móviles. Con el YU7, aspira a ser un actor clave en la movilidad del siglo XXI.