Los coches patrulla de la Policía Nacional se renuevan. Los Z, denominación interna para estos vehículos, más fecuentes en estos momentos, el monovolumen Citroën C4 Picasso fabricado en Vigo, dejará paso al SUV Citroën C5 Aircross y el Peugeot 3008 Hybrid, que se producen en Francia. El contrato también incluye unidades del Opel Astra, que se ensambla en Zaragoza, y del Peugeot 308.
El Grupo PSA ha anunciado que ha comenzado a entregar las primeras unidades de un megacontrato con el Cuerpo Nacional de Policía (CNP) para renovar su flota con 1.551 automóviles que utilizará en los próximos años en régimen de renting en colaboración con Alphabet. La Policía contará con hasta 642 unidades del Citroën C5 Aircross con un motor de gasolina PureTech de 130 caballos de potencia y una caja de cambios automática de ocho velocidades. Este modelo se produce actualmente en la factoría de PSA en Rennes.
Asimismo, otros 300 vehículos del modelo Peugeot 3008 híbridos enchufables de 225 caballos de potencia (producidos en la planta francesa de Sochaux) también se incorporarán a la flota en 2021. Dichos modelos sustituirán a 942 unidades del Citroën C4 Picasso y cumplirán las funciones de automóviles Z, con equipamiento específico y rotulación con los colores de CNP.
Del Talbot Horizon al C4 Picasso
Por último, el contrato también incluye 365 unidades del Peugeot 308 y 244 del Opel Astra, fabricado en Zaragoza, que se han incorporado al Cuerpo Nacional de Policía como vehículos camuflados.
"Estos automóviles continúan la relación del Grupo PSA con el Cuerpo Nacional de Policía, iniciada hace 35 años con el Talbot Horizon, fabricado en la factoría de Madrid, que se incorporó como coche patrulla con el color marrón que distinguía sus uniformes", ha reivindicado PSA.
Después del Talbot Horizon vino, en 1988, el Citroën BX, que se fabricó en la planta de Vigo entre 1983 y 1996; el Peugeot 306, el primer turismo diésel de la Policía; Citroën Xantia, entre 1998 y 2002; Citroën Xsara Picasso y el actual modelo C4 Picasso.
