La industria de la moto de Cataluña sufre otro revés. La marca Volta Motorbikes ha entrado en concurso de acreedores ocho años después de la puesta en marcha del fabricante catalán de motos eléctricas. El Juzgado Mercantil número 1 de Girona ha declarado el concurso voluntario presentado por Volta Motor Company, según publica la web Crónica Global.
El titular del juzgado mercantil ha nombrado administradora concursal a la firma Frade Gobeo, que ha designado a Luis Ignacio Frade Gobeo para hacerse cargo de la gestión de las deudas acumuladas por la empresa. La marca Volta Motorbikes se había convertido en los últimos años en la joya de la nueva industria de la moto de Cataluña después del cierre de las grandes fábricas de Yamaha, Honda y Piaggio (Derbi).
Motos por 10.000 euros
La compañía fue creada en 2011 por Marc Barceló, Joan Sabata y Diego Quiroga y desde final de 2014 ocupa la presidencia el inversor Alí-Reza Rajabali Bana, según explica Crónica Global. Después del desarrollo y homologación de sus modelos de gama media alta, la empresa empezó a fabricar sus motos en una planta en Figueres. Volta desarrolla motos con una autonomía de 100 kilómetros equivalentes a una motocicleta con motor de combustión de 250cc y con un precio que rondaban los 10.000 euros.
Volta Motorbikes se había convertido en una de las empresas principales del proyecto impulsado por la Generalitat para desarrollar una moto eléctrica catalana, que finalmente acabó en agua de borrajas. El concurso de acreedores de Volta se produce después de los problemas sufridos por Bultaco por la deuda acumulada.
