La pintura de un coche tiene más importancia de lo que parece. Además de proteger la carrocería de acero del vehículo, también se convierte en su cara visible y, a menudo, en una prolongación de la personalidad del conductor. Las mejoras técnicas en el proceso de fabricación de los pigmentos y en el método de pintado han hecho que algunos colores tengan hasta 140 variaciones. Es una de las curiosidades que aparecen en el informe anual que elabora BASF sobre las tendencias de la gama cromática aplicada a la industria de automoción.
¿Qué colores están de moda en los automóviles? La respuesta no es universal, puesto que la pintura preferida por los automovilistas dependen del área geográfica y del tipo de coche de que se trate. Sin embargo, hay algunas tendencias transversales que dominan los mercados automovilísticos en cuanto a cromatismo.
Hay cuatro colores que destacan especialmente y que entre ellos suman un 80% de los vehículos. Se trata del blanco, negro, gris y plateado, que hace años que se mantienen como los reyes absolutos aunque con algunas variaciones en la pugna entre esos colores acromáticos, según el informe anual de BASF.
El color número uno
Y entre los colores proclamados como los reyes. hay uno que es el emperador con mucha diferencia: el blanco. Pero las preferencias por el blanco, que se suele incluir de serie en los modelos y, por tanto, resulta más económico, son diferentes según el área geográfica. En Asia Pacífico, la mitad de los coches son blancos, según las tendencias de los turismos vendidos en 2018 recogidas por el informe de BASF. En cambio, en Norteamérica alrededor de uno de cada cuatro coches son blancos, mientras que en Europa es el color preferido por un tercio de los automovilistas.
Entre los cuatro colores más populares, el segundo que más triunfa ha cambiado, ya que el gris ha ganado partidarios y ha acabado superando al negro, que ha quedado desplazado al tercer puesto de la clasificación.
Pero el gris, como cada color, alberga numerosas variaciones en función de las tonalidades, los reflejos y otros aspectos que los fabricantes como BASF han ido incorporando a su gama cromática. El gris acumula un total de 110 variaciones que van del gris claro a antracitas metálicas muy oscuras. Sin embargo, hay otro color que tiene más variaciones, hasta 140: el azul. Este color registra una tendencia al alza especialmente en Europa, donde ha conseguido colarse como el cuarto más utilizado, con un 11% del mercado, desplazando al plata.
65 colores nuevos cada año
Aunque se trate de los colores aparentemente más sosos que dominan el parque automovilístico, hay una tendencia transversal que consiste en los acabados metálico y nacarado, que se aplicó en dos tercios de los coches.
Las diferencias en las preferencias de los colores son evidentes también en función de la carrocería y el tamaño del vehículo. Por ejemplo, en los turismos más grandes la gama cromática se reduce al dominar el blanco y el negro. En cambio, el azul y el rojo tienen más peso en los coches más pequeños en los que se busca más expresividad.
"El panorama de los efectos de los recubrimientos en automoción evoluciona continuamente y está formado por ideas nuevas e inspiradoras", indica Mark Gutjahr, jefe de Automotive Color Design Europe en la división de recubrimientos de BASF. El fabricante incorpora cada año a su gama cromática 65 nuevos colores basados en las tendencias del mercado.
