El año 2020 ha empezado de la peor manera posible para el mercado automovilístico. Las ventas de coches nuevos rompieron en enero la tímida e inestable recuperación iniciada cuatro meses antes con un descenso de las matriculaciones del 7,6%. Esta vez, las compras de automóviles de las empresas ya no actuaron como salvavidas de un mercado que sigue sufriendo un desplome de las ventas de turismos a clientes particulares.
En enero se vendieron solo 86.443 coches y todoterrenos nuevos, lo que significa un descenso del 7,6% en relación con 2019, un mes en el que empezaron a bajar con fuerza las matriculaciones. Aunque enero de 2020 tuvo un día laborable menos, el mal dato registrado ha sembrado la preocupación en las asociaciones de fabricantes (Anfac), concesionarios (Faconauto) y vendedores (Ganvam) porque rompe la tendencia positiva de los últimos cuatro meses de 2019 que permitieron suavizar el retroceso del ejercicio pasado hasta el 4,8%.
Empeoramiento de las tendencias
Las tendencias de fondo han empeorado. Por un lado, los particulares compraron un 14,2% menos de coches, con 40.551 unidades, con lo que encadena 16 meses de descensos con la única excepción de septiembre de 2019 por la distorsión del efecto de la nueva regulación de emisiones WLTP. Además, las compras de coches de renting y para flotas de empresas desaceleraron su subida hasta el 4,5% (32.785 unidades) y las matriculaciones para alquiladoras bajaron un 12,2%.
"Es preocupante el hecho de que las familias sigan sin optar por un coche nuevo y estén prefiriendo adquirir un vehículo muy antiguo, como demuestra el hecho de que las ventas de vehículos de más de 20 años crecieron un 17% en 2019. Es necesario apostar por la renovación del parque cuanto antes, para conseguir los objetivos comunes de lucha contra el cambio climático y reducción de la contaminación", asegura Noemí Navas, directora de comunicación de Anfac.
Dudas de los consumidores
Para Raúl Morales, responsable de comunicación de Faconauto, "el comprador sigue sumido en la duda y en el desconcierto, de ahí la caída en matriculaciones del canal de particulares". Los concesionarios prevén que 2019 "dos mitades muy diferenciadas este año: un primer semestre en el que se mantendrán las tendencias del año pasado, y un segundo en el que, probablemente, las marcas tendrán que trasladar a sus políticas comerciales alrededor del diésel y el eléctrico su necesidad de cumplir con los límites de CO2. Los compradores serán los grandes beneficiados de esta situación”.
"Hay que terminar con la incertidumbre sobre qué tecnología comprar e insuflar confianza en el comprador si se quiere fortalecer un mercado que todo apunta a que seguirá débil en los primeros meses de año", indica Tania Puche, directora de comunicación de Ganvam.
