Europa tiene que ser más rápida, como ha hecho Estados Unidos, a la hora de afrontar los retos de la industria de la automoción, según el presidente de Sernauto, Francisco Riberas. Ha puesto como ejemplo de buenas prácticas la subvención de hasta el 50% de la baterías que se fabriquen en EEUU.
"Europa tiene que reaccionar para no ser los más tontos", ha dicho Francisco Riberas, que ha añadido que "no podemos dejar que estas cosas nos pasen". El presidente de Sernauto ha destacado, en un encuentro de la asociación y EY, que en el mundo se fabricarán unos 92 o 93 millones de vehículos en 2027, aunque no se llegará a los 95 millones que se produjeron en 2017, cuando se alcanzó el récord. Para Riberas, que ve más difícil la recuperación en Europa, hay que acostumbrase a un escenario de volúmenes de producción más bajos.
Aranceles para coches chinos
El presidente de Gestamp y de Sernauto ha recordado que en China ya se produce un 30 % de los vehículos del mundo, pero dada la fuerte demanda interna en el gigante asiático no cree que los fabricantes de allí vayan a venir a producir coches a Europa, aunque ha advertido que en Europa no nos podemos dormir. Por ello ha defendido que se establezcan aranceles en frontera que protejan a Europa y que aseguren que los productos que vengan al continente desde otras geografías se hagan con las mismas normas que aquí.
"Si no lo hacemos, estamos muertos", ha dicho Riberas, que ha añadido que echa de menos que "Europa se más rápida" y que cosas que en Estados Unidos se tardan en hacer dos minutos, en Europa tarden dos años.
Ha augurado que la batalla que tendrá el sector de proveedores y de componentes en 2023 será cómo traslada la inflación y la subida de costes que está sufriendo. Riberas ha dicho que el sector lleva 20 años sin hacer ningún tipo de repercusión de la inflación, y ha indicado que este año ya ha habido una "pelea fuerte" por la repercusión de los costes y que en 2023 será la discusión de la subida de los costes laborales.
La parte buena del PERTE
Respecto a la crisis por el desabastecimiento de semiconductores, ha dicho que el problema no se va a arreglar de un día para otro, pero ya se proyectan fábricas de chips y ampliaciones de capacidad en existentes, con lo que el sector del automóvil va a estar mejor planificado. Riberas ha defendido la flexibilidad en el sector de la automoción en general y ha llamado a no perderla, aún más dadas las circunstancias vividas en los tres últimos años.
Para Riberas, la primera convocatoria de ayudas del PERTE del vehículo eléctrico y conectado (VEC ha tenido aspectos positivos aunque le hubiera gustado que fuera más rápido y que hubiera adjudicado más fondos. Ha señalado que ya está lanzada la base para la primera fábrica de baterías para coches eléctricos que va a haber en España, algo fundamental para el desarrollo del vehículo eléctrico en el país.
Además, ha añadido que hay perspectivas de que la segunda convocatoria del PERTE VEC pueda aprovecharse para ganar en flexibilidad, que sea más fácil acceder a las ayudas y que se pueda usar más dinero del presupuesto que hay.