El Nissan Leaf, uno de los eléctricos pioneros, vuelve con una tercera generación que aspira a recuperar protagonismo frente a la creciente avalancha de modelos en Europa. Nissan ha decidido rediseñar de arriba abajo el que fue el primer coche eléctrico que aspiraba a conquistar las masas. Y lo hace no solo con una apuesta estética y tecnológica más ambiciosa, sino con un claro mensaje de la marca y de la fábrica de Sunderland donde se produce: el Leaf no se rinde.
La nueva generación llegará a los concesionarios europeos en la primavera de 2026, con pedidos abiertos a finales de este año. En juego está el renacimiento de un icono y el futuro de una fábrica crucial para la estrategia global del grupo japonés después de su repliegue industrial en Europa, aunque los 6.000 empleados de Sunderland dependen mucho más de las ventas del Qashqai y el Juke, que también se electrificarán en el futuro.
Diseño del nuevo Nissan Leaf
Un Leaf con ambiciones renovadas
Desde su lanzamiento en 2010, el Leaf ha sido mucho más que un modelo para Nissan: ha sido bandera de una revolución. Ha vendido una cifra acumulada de 700.000 unidades, una media de unas 50.000 unidades al año que se reparten entre las plantas de Sunderland (Reino Unido), Tennesse (EEUU) y Opama (Japón). Pero el mercado ha cambiado. El aumento de rivales, especialmente procedentes de China, y la nueva generación de eléctricos europeos han eclipsado su atractivo en los últimos años.
El nuevo Leaf es también una apuesta industrial. La planta de Sunderland, que acumula más de 250.000 unidades fabricadas, será la encargada de producir esta tercera evolución para el mercado europeo dentro del marco del plan EV36Zero. Un proyecto que incluye una nueva gigafactoría de baterías y la electrificación total del Qashqai y el Juke, dos pilares del negocio de Nissan en Europa. Con más de 1.300 millones de euros de inversión pública y privada, el gobierno británico ha respaldado este ambicioso plan con subvenciones directas, posicionando Sunderland como el nuevo Silicon Valley del coche eléctrico en el Reino Unido, en palabras del exprimer ministro Rishi Sunak.
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Del pionero al eléctrico familiar
En un mercado saturado de nuevas propuestas eléctricas, el Leaf buscará ahora un nuevo espacio: ser el coche familiar eléctrico por excelencia, con el sello de una marca con experiencia, una plataforma robusta compartida con el Ariya y un precio más competitivo que muchos de sus nuevos rivales.
Para revertir esa tendencia, el nuevo Leaf llega con argumentos de peso: un diseño más aerodinámico y menos extemporáneo, tecnologías conectadas, mayor eficiencia y hasta 604 kilómetros de autonomía. Con baterías de 52 o 75 kWh y carga rápida de hasta 150 kW, el nuevo Leaf puede recorgar electricidad para hasta 417 kilómetros en solo 30 minutos. Además, ofrece más de 330 km de autonomía real a 130 km/h, una cifra competitiva para quienes buscan un coche eléctrico sin compromisos en desplazamientos largos.
Nissan promete además una experiencia de uso más intuitiva y práctica, con funciones como carga bidireccional (V2L y futura compatibilidad con V2G), un nuevo sistema de planificación de rutas con inteligencia térmica para optimizar la carga y un enfoque centrado en el día a día del conductor europeo. “El nuevo Leaf es más elegante, más conectado y más capaz”, declaró Clíodhna Lyons, vicepresidenta de producto de Nissan en Europa.
Adiós al diseño a contracorriente
Uno de los cambios más significativos es su lenguaje de diseño. El Leaf abandona el aspecto de compacto con formas poco convencionales que lo había caracterizado desde su debut, y da paso a una estética SUV más robusta y estilizada, muy en línea con las preferencias actuales del mercado.
Las similitudes con su hermano mayor, el Nissan Ariya, son evidentes: formas fluidas, faros 3D, techo flotante y una silueta más musculosa. Incluso recuerda, por proporciones y planteamiento, al Toyota C-HR, uno de los SUV urbanos más populares de Europa. Este giro de timón busca que el Leaf deje de ser un coche “de nicho” para convertirse en una opción generalista.
