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Al volante del Mobilize Limo, el taxi del futuro de Renault

Esta berlina fabricada en China, que se estrena en Madrid con Cabify solo por suscripción, destaca por su gran confort para pasajeros y conductor

Berlina Mobilize Limo de Renault

Berlina Mobilize Limo de Renault

Ana Montenegro

03.06.2022 22:32h

5 min

Renault ha escogido Madrid para estrenar su nueva marca, Mobilize, y el primer vehículo con este nombre, el Limo. Se trata de una berlina de tres cuerpos, 100% eléctrica, fabricada en China y destinada a servicios de transporte de personas con conductor, taxis o VTC, que está ya probando en la capital la empresa Cabify con 40 unidades. Los primeros resultados se conocerán a final de año. Antes, en otoño, se empezará a probar en Francia y después en Italia. Pero nosotros ya hemos probado una unidad de Mobilize Limo

El Mobilize Limo no estará a la venta, sólo se comercializará mediante un servicio de suscripción, sin entrada, que puede prolongarse entre tres meses y seis años o 300.000 km y que incluye desde cambio de neumáticos a asistencia en carretera, además de atención prioritaria en talleres de referencia del Grupo Renault. Al tratarse de una herramienta de trabajo el objetivo es que esté parado el menor tiempo posible. De hecho, Renault asegura que los costes totales de explotación (TCO) del Limo son un 10% inferiores a los de un híbrido o un diésel con el mismo uso en un periodo de 36 meses o 150.000 km

12 horas de servicio

Madrid, que ya fue el banco de pruebas de Zity, la empresa de carsharing de Renault, ahora ya integrada en Mobilize, vuelve a ser pionera en este proyecto con el que el grupo Renault prevé hacer frente a una demanda creciente. Se prevé que los servicios de taxi y VTC en las principales ciudades europeas aumenten un 80% en diez años, entre 2020 y 2030. 

El Mobilize Limo, que en China se llama Ezoom Yi, se ha concebido para el uso intensivo que se le va a dar. Se trata de un vehículo que puede estar funcionando sin parar unas 12 horas al día y en el que los pasajeros tienen que estar cómodos. Por eso el grupo Renault ha buscado entre sus socios el que tenía el vehículo más adecuado y lo ha localizado en la joint venture con la filial de vehículos electicos de Jiangling Motors Corporation Group (JMCG), denominada JMEV. La batería la suministra la también china Farasis.

Construido sobre una plataforma especifica que lleva bajo el piso las baterías, el Limo mide 4,67 metros de largo con una batalla de 2,75 metros. Tiene una anchura de 1,83 metros y 1,47 de alto. Teniendo en cuenta el uso que se le va a dar dispone de un maletero de 500 litros en el que caben dos maletas grandes y dos troley.

Comodidad delante y detrás

Las plazas traseras son cómodas, con un gran espacio para las piernas, 288 mm, frente a los 209 del Megane e-Tech 100% eléctrico o los 225 del Tesla Model 3. Los pasajeros disponen de dos puertos USB y dos controles para el volumen del equipo de audio. No hace falta hablar con el conductor. El hueco de la parte trasera de la consola central está refrigerado y es fácilmente accesible desde las plazas traseras.

Está propulsado por un motor eléctrico de 118 kW (169 caballos) con un par máximo de 225 Nm, disponibles desde el arranque, y con una batería de 60 kWh, que le da una autonomía de 450 km en homologación WLTP. Aunque el uso de elementos eléctricos o la climatización puede reducir un poco esa autonomía parece suficiente para la misión de este coche. Se estima que un taxi circula entre 150 y 300 km al día. Los tiempos de recarga van de las 10 o 12 horas a 7 Kw, por la noche, o en 7 -8 horas a 11 kW, un descanso. También se pueden cargar 250 km de autonomía en 40 minutos en un cargador rápido, poco adecuando en caso de tener que controlar el consumo porque son más caros.

El diseño exterior es sobrio pero muy elegante, con un cierto aire a un Tesla pero también a una berlina clásica. Se va a comercializar en colores neutros (blanco, negro, gris), habituales en los coches de representación 

Mobilize Limo, estable y ágil

Probé el Limo como pasajero, pero también como conductor y lo primero que me gustó es que resulta agradable tanto en las plazas traseras como al volante. La elegancia exterior se repite en el interior con una amplia consola central, con un gran hueco inferior y en la que está la palanca del cambio automático, un botón para seleccionar los modos de conducción posibles (normal, sport o eco) y otros elementos que deben estar a mano como el warning o el freno eléctrico. En la parte inferior de la consola central está el control de la climatización cubriendo el salpicadero una gran pantalla que, en realidad, son dos. Una frente al conductor de 10,2 pulgadas con las indicaciones de velocidad, consumo, ayudas a la conducción, etc y otra en el centro, táctil de 13,3 pulgadas para la navegación, los ajustes del vehículo, comunicaciones etc.

Los tiradores de las puertas están enrasados en la carrocería y se despliegan por la derecha al accionar la apertura con la llave. El arranque se hace con un botón a la derecha del volante y si el conductor no tiene abrochado el cinturón no se pone en marcha. Esta limitación no existe con el resto de los ocupantes.

El Limo es estable, incluso en maniobras un poco bruscas, con un freno también suave pero eficaz. Se nota que es un coche concebido para los pasajeros de las plazas traseras que deben viajar cómodos y con seguridad. Eso no implica que sea pesado porque es capaz de girar en sólo 11,2 metros.

Ayudas para la ciudad

Las ayudas a la conducción cumplen las necesidades de uso: Stop&go, regulador de velocidad adaptativo, radar de detección delante y detrás, ya que se trata de un coche de uso urbano, y además ayuda al aparecimiento de 360º. Renault ha desarrollado una app específica para controlar la carga o la climatización a distancia.

En Madrid, donde ya están operativos los Mobilize Limo, ya funcionan siete talleres especializados, una red que se irá ampliando en la medida en que otras ciudades se incorporen al proyecto. El precio de las cuotas de uso aún no se ha revelado y en cuanto a su vida tras la finalización del contrato, los vehículos no se venderán, se refabricarán y volverán al mercado a un precio más bajo.

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