Industria

La muerte de una trabajadora de Iveco por un vídeo sexual sacude la sociedad

CCOO denuncia a la empresa por no activar el protocolo de acoso sexual

Trabajadores de la planta de Iveco de Madrid durante una huelga en 2018

Trabajadores de la planta de Iveco de Madrid durante una huelga en 2018

Pilar Aragón

29.05.2019 10:26h

2 min

La muerte de una trabajadora de la fábrica de Iveco de Madrid ha conmocionado a la plantilla y a la sociedad. La empleada, una carretillera con dos hijos, se quitó la vida el pasado sábado después de sufrir el acoso de un compañero mediante la difusión de un vídeo sexual a través de Whatsapp, según han explicado los sindicatos y la policía. 

Trabajadores de Iveco se han mostrado en shock después de conocer la noticia del fallecimiento de su compañera, que ha destapado unos hechos que han generado también indignación dentro y fuera de la compañía. La muerte de la empleada se produjo después de la difusión por Whatsapp entre la plantilla de un vídeo de contenido sexual y tras una reunión de la afectada con la dirección de Iveco y el sindicato CCOO, del que era afiliada. 

Denuncia e investigación

En esa reunión, CCOO planteó a la compañía la necesidad de activar el protocolo de acoso sexual. "La representación de CCOO de Industria en la factoría de IVECO acompañó a la trabajadora a una reunión con la empresa. Le informó de lo que había ocurrido y de la persona que presuntamente había iniciado la difusión de un vídeo. La compañía decidió mirar para otro lado y no tomar ninguna medida. Alegó que se trataba de un asunto personal y no de ámbito laboral", explica el sindicato en un comunicado.

CCOO ha anunciado que denunciará el caso ante la Inspección de Trabajo por lo que considera como un incumplimiento de la ley de igualdad entre mujeres y hombres y de la norma de riesgos laborales. Al mismo tiempo, el sindicato reclama que se considere la muerte como accidente laboral y para que "se tomen todas las medidas laborales y penales que garanticen que no vuelvan a producirse estas circunstancias". 

La compañía ha alegado que ofreció a la empleada afectada la posibilidad de poner en marcha el protocolo por acoso sexual si denunciaba a su acosador, lo que finalmente no se produjo. 

El sindicato UGT ha mostrado su "desolación y solidaridad" con la familia y amigos "ante el suicidio de  la compañera trabajadora Verónica" y muestran su confianza en que las investigaciones judiciales iniciadas "lleguen hasta el final" y que se escalrezcan los hechos y se determinen las responsabilidades pertinentes". 

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