Las acciones de Gestamp se desplomaron un 10,48 %, la mayor caída del mercado español en la jornada, después de que la compañía comunicara un beneficio neto de 104 millones de euros entre enero y septiembre, lo que supone un 18 % menos que en el mismo periodo del año anterior.
Cada título del grupo especializado en componentes metálicos para automóviles cerró en 2,956 euros, tras perder 0,346 euros en la sesión. Aun así, Gestamp mantiene un balance positivo en el año, con una revalorización acumulada del 33,15 %.
La empresa explicó que estos resultados se han obtenido en un entorno complejo, dentro de un sector en plena transformación, marcado por la volatilidad de la producción, la presión arancelaria y la incertidumbre regulatoria derivada del proceso de electrificación y las tensiones comerciales.
Ingresos y previsiones a la baja
En cuanto a la facturación, Gestamp ingresó 8.486 millones de euros en los nueve primeros meses del año, por debajo de los 8.927 millones del mismo periodo de 2024. Las malas noticias también afectan a los ingresos, que bajan un 5,2 % en el tercer trimestre y un 4,9 % en el conjunto de los nueve primeros meses del ejercicio. Los inversores bursátiles también valoran que la compañía ha crecido por debajo de la media del sector, lo que hace prever que sea imposible cumplir su previsión inicial de crecer por encima del mercado.
Gestamp, presente en más de 20 países y proveedor de grandes fabricantes automovilísticos, enfrenta un escenario de presión en márgenes y ajustes en la demanda, especialmente en Europa, donde la desaceleración del mercado y la transición hacia el vehículo eléctrico están afectando a todo el sector de componentes.
