El dieselgate del grupo FCA costará a la multinacional 800 millones de dólares (694 millones de euros) en multas y compensaciones. Ese es el importe consignado en un acuerdo firmado entre el grupo Fiat Chrysler Automobiles (FCA) y la Administración de Estados Unidos.
La investigación iniciada después de que estallara el dieselgate de Volkswagen en EEUU ha dado como resultado un proceso en el que el Departamento de Justicia estadounidense acusa al grupo FCA de haber trucado 104.000 coches para camuflar sus emisiones de gases mediante la instalación de un 'software' ilegal. Los modelos afectados son Ram 1500 de los años 2014 a 2016 y Jeep Grand Cherokee con motor diésel V6 de tres litros.
Compensación a los afectados
El acuerdo alcanzado en este nuevo dieselgate prevé el pago de multas por un importe de 400 millones de dólares en respuesta a la vulneración de las homologaciones de sus vehículos en Estados Unidos. Además, FCA destinará otros 400 millones a pagar compensaciones de 2.800 dólares a los clientes afectados, así como a ampliar las garantías y para llevar a cabo medidas de reducción del impacto medioambiental.
El pacto también salpica a Bosch, que tendrá que pagar 27,5 millones de dólares por haber diseñado el programa informático que permitió trucar las emisiones de los coches afectados. Sin embargo, FCA sostiene que no cometió un fraude deliberado para trucar los motores y engañar en las pruebas de emisiones.
