La red de carga rápida de vehículos eléctricos Fastned, creada en Países Bajos como alternativa a Ionity, cuenta ya con unas 300 electrolineras en marcha en Europa. Sin embargo, la última que ha abierto es singular ya que estrena un nuevo concepto que combina la estación de carga de vehículos eléctricos con un restaurante y una tienda.
La carga ultrarrápida con una velocidad de 300 kW se ha convertido en una necesidad en las redes ubicadas en autovías y autopistas para acometer viajes de largo recorrido. Y si no que se lo digan a los conductores que quedaron atrapados por la cola en el Supercharger de Tesla en Atalaya del Cañavete en la operación retorno de Valencia a Madrid durante la Semana Santa.
¿Carga en 15 minutos o comida?
Fastned presume de ofrecer una carga ultrarrápida para recorrer 300 kilómetros en tan solo 15 minutos, si el vehículo admite esa potencia de recarga. Pero esos 15 minutos se pueden quedar cortos para los usuarios de la nueva estación de carga de Brecht (Bélgica), que ha estrenado el nuevo concepto de restaurante y tienda. La enseña de Fastned visible desde la autovía ya no indica únicamente la existencia de puntos de carga, sino también de una tienda con cafetería y servicio de comida ligera.
"No se trata sólo de poder cargar el coche de la forma más agradable y rápida posible, sino también de poder relajarse, ir al baño y adquirir productos más saludables a lo largo de la autopista", señala la compañía neerlandesa. En palabras de Luuk Valk, director de desarrollo Retail de Fastned, se trata de "un oasis de luz y tranquilidad diseñado para ofrecer a los visitantes un momento de relajación".
La electromovilidad se convierte también un una oportunidad de negocio para inversores como los que aglutina Fastned en sus electrolineras, que reinventan las estaciones de servicio. Hasta el punto de que algunos propietarios de estaciones de servicio junto a gasolineras intentaron frenar la iniciativa de Fastned en los tribunales, aunque sin éxito.
Prueba piloto
Para la compañía, la nueva electrolinera con tienda y restaurante de comida rápida puede ser una prueba piloto con la que comprobar si los usuarios priorizan la rapidez de carga del coche a la "propia recarga", tal como se puede leer en el nuevo establecimiento. La siguiente electrolinera en adoptar el nuevo modelo será la de Gentbrugge, en Flandes (Bélgica). "Las lecciones que aprendemos aquí (en Brecht) nos van a ayudar a desarrollar futuras estaciones de servicio", destaca Valk.
Fastned anunció recientemente su desembarco en España con seis estaciones de carga con una potencia de hasta 400 kW, enmarcadas en su plan de alcanzar las 1.000 electrolineras en Europa. La primera en España se ubicará en la autovía de Madrid a Toledo, en la población madrileña de Casarrubuelos.
