En España había 32.422 puntos de recarga de vehículos eléctricos de acceso público instalados a finales de marzo de 2024. A esos puntos hay que sumar 8.645 no operativos. Esto no termina de arrancar, y no es culpa del usuario, ni de las marcas automovilísticas, ni de las eléctricas… Nadie de los que debe pone el cascabel a este gato. Nos lo cuenta el Barómetro Electromovilidad de Anfac del primer trimestre de 2024.
Contesta en este enlace el Barómetro de movilidad y automoción Auto Mobility Trends 2024
Pero qué fue primero, ¿la gallina o el huevo? Porque durante el IV Foro Anfac en febrero la secretaria de Estado de Industria, Rebeca Torró, ya manifestó que los puntos de recarga deben crecer a la vez que las ventas de vehículos, cita que extrañó a muchos de los allí presentes. ¿Resultado en la primera parte del partido cruzando puntos de recarga y ventas? Durante el primer trimestre de 2024 se vendieron 27.077 turismos electrificados de los 70.000 previstos, lo que llega solo al 9,7% del cumplimento del objetivo anual, fijado en 280.000. Vamos, que la cuota de mercado del vehículo electrificado, peor que hace un año.
España, tercer país por la cola
Mientras tanto, la red pública de recarga creció en 3.121 nuevos puntos operativos para totalizar 32.422 puntos. Claro que si cruzamos el ritmo de crecimiento de puntos nuevos, +10%, con el de puntos no operativos que suben el 11% -900 más hasta totalizar 8.645 puntos que deberían funcionar y no lo hacen por rotura, inactividad o problemas burocráticos- el resultado se devalúa y nos aleja del objetivo de 64.000 puntos a final de año para estar en línea con lo que nos pide Europa. Resultado al descanso: 21% de los 41.067 puntos de recarga públicos instalados en nuestro país no son operativos, lo que nos llega a una deshonrosa antepenúltima posición europea, detrás de Chequia y Hungría.
En cuanto a puntos de alta potencia o supercargadores de más de 150 kW, 578 nuevas opciones en el primer trimestre del año para alcanzar 2.103 puntos totales, el 6,5% de la red total. Bajemos un escalón y solo el 25% de la infraestructura de recarga de acceso público en España corresponde a carga con potencia superior a 22 kW cuando deberíamos estar en el 51% a final de año. ¿Resultado para terminar el partido? El 56,3% de los puntos instalados en el primer trimestre del año por debajo de los 22 kW, lo que desequilibra aún más la balanza camino de una red de recarga cómoda y práctica para el usuario del vehículo eléctrico.