La gasolina acaba 2022, un año de precios de récord, costando un 30 % menos que en junio, cuando marcó su máximo pese a contar ya por entonces con un descuento de 20 céntimos por litro subvencionado por el Gobierno para toda la ciudadanía, una bonificación universal que desaparecerá el domingo 1 de enero de 2023.
Según los datos difundidos este jueves en el Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE), que recoge el precio medio registrado en más de 11.400 estaciones de servicio españolas entre el 20 y el 26 de diciembre, el precio de la gasolina se situó, una vez aplicado el descuento, en 1,365 por litro, mientras que el del gasóleo alcanzó 1,443 por litro.
Eso quiere decir que el precio de la gasolina ha disminuido un 1,8 % en los últimos siete días, mientras que el gasóleo es un 1,23 % más barato que en la misma semana en la que el Gobierno ha anunciado el fin del descuento para los particulares, aunque para los transportistas profesionales.
La gasolina, como en junio de 2021
Así, la gasolina encadena seis semanas de descensos y se sitúa a niveles de junio de 2021, cuando su precio era de 1,367 euros el litro, si bien entonces no se aplicaba la rebaja, que entró en vigor en abril. El gasóleo, por su parte, suma nueve semanas a la baja y su precio está a niveles de comienzos de febrero, cuando todavía no había comenzado la invasión de Ucrania, pero es más caro que a inicios de 2022, cuando costaba 1,347 euros por litro.
La gasolina ha bajado un 7,71 % si se compara con principios de año con el descuento incluido, mientras que, en el extremo contrario, el gasóleo es un 7,13 % más caro. Respecto a la semana del 20 de diciembre de 2021 -la del 27 de diciembre la UE no aportó datos-, la gasolina es un 7,52 % más barata, aunque el gasóleo es un 7,37 % más caro.
Con los precios actuales, llenar un depósito medio de 55 litros con gasolina cuesta 75,08 euros, mientras que si se reposta el mismo depósito con gasóleo habrá que pagar 79,37 euros.
A principios de 2022, en cambio, llenar este depósito de gasolina costaba 81,35 euros, 6,27 más que ahora, mientras que si se hacía con gasóleo se pagaba 74,09 euros, 5,28 euros menos que en la actualidad. Tras las últimas bajadas, la gasolina es un 10,8 % más barata que hace justo un mes y el gasóleo cuesta un 11 % menos.
Año de récord
Así, el precio de los carburantes cerrará a la baja un año de récord, ya que el pasado verano -impulsados por los efectos de la invasión rusa de Ucrania que comenzó en febrero y que aún continúa- superaron incluso el máximo marcado hace una década, pese al descuento de 20 céntimos del Gobierno.
La gasolina alcanzó su máximo el pasado 20 de junio de 2022, semana en la que se pagaron en surtidor, una vez aplicado el descuento, 1,941 euros por litro, mientras que el gasóleo lo hizo una semana después, el 27 de junio, al marcar 1,9 euros el litro.
No obstante, en el segundo semestre del año los precios de los carburantes se han estabilizado. De hecho, si se compara con estos máximos, la gasolina es en la actualidad un 29,7 % más barata, mientras que el gasóleo ha caído un 24,1 %. Además, la gasolina ya cuesta igual que antes de la guerra incluso sin tener en cuenta el descuento de 20 céntimos.
Descuento selectivo y decreciente
Los precios publicados corresponden a la última semana completa en la que la gasolina y el gasóleo contarán con el descuento de 20 céntimos por litro de combustible para todos los consumidores, después de que el Consejo de Ministros decidiera acabar con la bonificación a partir del 1 de enero de 2023.
El Gobierno sí que mantendrá este descuento para los transportistas por carretera hasta marzo y lo reducirá a 10 céntimos en el segundo trimestre. Además, dará ayudas por os carburantes a agricultores, ganaderos y pescadores.
Durante el tiempo que ha estado esta medida en vigor, el precio medio del litro de gasolina ha rondado 1,64 euros y el del gasóleo se ha situado en torno a 1,69 euros.
La iniciativa ha evitado que el precio del litro de la gasolina rompiera con la barrera de los dos euros durante siete semanas consecutivas, entre junio y julio de este año, mientras que el gasóleo lo habría hecho en cinco semanas durante el mismo periodo.
No obstante, el descuento no ha evitado que durante su vigencia la gasolina y el gasóleo marcaran sus máximos históricos.
