Industria

La planta de baterías de Seat se va a Valencia

Las nuevas instalaciones de Sagunto darán trabajo a 3.000 empleados y se integran en un proyecto de 7.000 millones de inversión global

Wayne Griffiths, presidente de Seat, y el resto de dirección

Wayne Griffiths, presidente de Seat, y el resto de dirección

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Toni Fuentes

23.03.2022 09:46h

5 min

La planta de baterías de Seat y de Volkswagen en España se va a Valencia, tal como ha confirmado hoy el grupo en una rueda de prensa celebrada en Barcelona. La fábrica de Martorell se quedará con la producción de coches eléctricos pequeños, que también se ensamblarán en Navarra. El proyecto conjunto supondrá una inversión de 7.000 millones de una alianza de 30 empresas, siempre y cuando reciban las ayudas del PERTE del vehículo eléctrico, dotado con casi 3.000 millones. 

El anuncio que confirma los rumores que circulaban en las últimas semanas se ha hecho al más puro estilo olímpico, con la correspondiente pausa antes del anuncio por parte del jefe de tecnología del grupo Volkswagen y presidente del consejo de Seat, Thomas Schmall, desde Wolfsburg que la planta de baterías se hará en... Sagunto. Tendrá 3.000 empleados y una capacidad de 40 GWh, que le permite suministrar baterías a unos 800.000 coches al año.

Inversión global de 7.000 millones

El grupo ha justificado la ubicación en Sagunto por la rapidez que dará al proyecto para empezar a producir en 2026, gracias a los permisos y trámites más ágiles. En la decisión ha influido también la alianza de Volkswagen con Ford, que tiene su fábrica de Almussafes muy cerca, para producir coches eléctricos. La logística y la formación de trabajadores también han pesado en la decisión, que la firma enmarca en un "proyecto de país". 

El proyecto Future: Fast Forward F3 de Seat movilizará 7.000 millones de euros en todo su recorrido y mediante una alianza de una treintena de empresas. Martorell se quedará con 3.000 millones de esa inversión para producir nuevos eléctricos pequeños. Ese proyecto F3 aspira a adjudicarse los casi 3.000 millones de ayudas públicas del PERTE del coche eléctrico cuya convocatoria acaba de publicar el Gobierno central.

"Será el proyecto industrial más grande en la historia de España", ha destacado el presidente de Seat, Wayne Griffiths, que ha añadido que está supeditado a la adjudicación del PERTE. Sin embargo, ha alertado de que es imprescindible acelerar la penetración de la movilidad eléctrica en España para que los nuevos vehículos tengan más cuota de mercado y permitan al país salir de las últimas posiciones en Europa.

Cataluña llegó tarde

Valencia se ha impuesto así a las candidatruas de Aragón y de Extremadura, que eran las tres ubicaciones finalistas en el proceso de selección. Cataluña también presentó candidatura con terrenos en Lleida y Tarragona, pero llegó "demasiado tarde", según ha lamentado Matías Carnero, presidente del comité de empresa.

Seat ha anunciado la ubicación de su planta de baterías en la presentación de resultados de 2021, que registraron unas pérdidas de 256 millones de euros a pesar de algunos indicadores de mejora como el ingreso medio por coche vendido, que fue de 16.850 euros gracias al auge de Cupra y de los nuevos eléctricos e híbridos. En los últimos cinco años, el ingreso medio creció 2.580 euros. 

Menos inversión

Las inversiones en I+D bajaron en 2021 de 1.029 millones a 905 millones en un año "extremadamente difícil" por la falta de microchips, tal como ha recordado el vicepresidente de finanzas de Seat, David Powels. "Es importante haber mantenido nuestras inversiones por encima de 900 millones. Es una prueba del compromiso de la marca", ha añadido.

El resultado operativo fue de 371 millones de pérdidas con la contabilidad española, muy superior a los 233 millones anunciados unos días antes por el consorcio Volkswagen basándose en las normas internacionales.

La guerra de Ucrania también está afectando a Seat, que ha reducido el ritmo de producción en Martorell y sufre los parones en otras plantas del grupo que ensamblan sus modelos. "No podemos seguir generando pérdidas. Tenemos que aprovechar la crisis para ser más robustos", ha asegurado Wayne Griffiths. "Necesitamos más flexibilidad para reducir producción y para maximizarla", ha indicado Griffiths en una alusión a la negociación en marcha del convenio colectivo.

"Nuestro futuro se basa en la flexibilidad y la capacidad de anticiparnos", ha subrayado Griffiths en un mensaje dirigido al presidente del comité de empresa, Matías Carnero, que asistía a la presentación de resultados. El directivo ha confirmado la estrategia de electrificación de Seat con el proyecto F3 pero no se ha referido al excedente de 2.800 empleados que está sobre la mesa de negociación del convenio. En respuesta a una pregunta posterior, Griffiths ha dicho que el objetivo es "minimizar" el imapcto y crear más empleo en toda la cadena de suministro.

Respecto a la fábrica de Seat Componentes, Griffiths ha dichos que el objetivo es sustituir las cajas de cambio que quedarán obsoletas por otros productos. Al mismo tiempo, Griffiths ha admitido que necesitarán más modelos eléctricos para Martorell cuando ya no se vendan los de combustión. 

Nuevos híbridos de Cupra

La vuelta a la rentabilidad de Seat pasa por el desarrollo de Cupra, que ha vendido más de 135.000 coches en sus cuatro años de trayectoria como marca separada de la matriz. La compañía espera que Cupra logre 5.000 millones de facturación este año, lo que le puede permitir dar el sorpasso con Seat.

En la hoja de ruta de Cupra, la marca ha anunciado una nueva generación de híbridos producidos en Hungría, que tendrán una autonomía de hasta 100 kilómetros. La marca prevé lanzar el SUV Tavascan eléctrico y un nuevo todocamino híbrido en 2024 y el pequeño eléctrico UrbanRebel y otro SUB híbrido en 2025.

En cambio, Seat solo tiene por delante actualizaciones de modelos porque Griffiths considera que la gama "está más actualizada que nunca" y porque la prioridad es la electrificación y Cupra. 

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