La Generalitat catalana focalizará en la automoción el 25% de sus recursos para apoyar las empresas industriales y hará un seguimiento específico mediante una nueva estructura, algo así como una ventanilla única. Sin embargo, la nueva Oficina Pública para la Transformación de las Industrias de Movilidad y Automoción presentada por el 'conseller' de Empresa i Treball, Roger Torrent, nace en medio de duras críticas de los sindicatos.
En la práctica, la nueva ventanilla ofrecerá 17 millones en 2022, el 25% de los fondos presupuestados para la industria, para ayudar a un sector que factura 25.000 millones de euros pero que está sufriendo un goteo de cierres y ajustes en fábricas de proveedores así como el mazazo de la fuga de Nissan y una nueva amenaza de recorte de plantilla en Seat, la principal compañía industrial catalana.
Torrent presentó esta inyección económica como una medida que da prioridad de forma transitoria a la automoción. "Queremos acompañar al sector, liderar las acciones para ayudarlo a reconvertise, promover nuevos proyectos y que recupere peso industrial", indicó el dirigente republicano.
Los sindicatos exigen recursos
La nueva oficina tendrá "un rol esencial en el apoyo al sector", según destacó Natàlia Mas, directora general de Indústria. Arranca con un presupuesto de funcionamiento de 200.000 euros y un equipo liderado por el 'project manager' de programas de movilidad de la Conselleria de Empresa i Treball, Tomás Mejía. Además, estará coordinada con la oficina que gestiona los fondos Next Generation EU y las 40 oficinas de Acció de captación de inversiones en otros países.
La Generalitat enmarca esta media como una de las tres medidas urgentes del Pacte Nacional per a la Indústria 2022-2025 y permitirá acceder a una línea de financiación de 123 millones del Institut Català de Finances (ICF) y la empresa pública de inversiones industriales Avançsa.
Sin embargo, la presentación de la nueva Oficina de Automoción de la Generalitat ha generado una airada reacción por parte de las federaciones de industria de CCOO y UGT. Los sindicatos consideran que faltan recursos y "concreción" y aseguran que la oficina no ha sido acordada por los agentes sociales y que su presentación pública fue "desafortunada" y un acto propagandístico. UGT y CCOO piden medidas específicas de apoyo para las empresas en transición y "alternativas para las que están amenazadas de cierre" mediante proyectos de reindustrialización.
Proveedores en peligro
Un estudio del Govern identificó 90 proveedores de automoción con riesgos altos por su especialización en productos relacionados con los vehículos de combustión y que tienen que bucar alternativas de negocio.
Después de explicar a la prensa la nueva oficina, Roger Torrent y su equipo se reunieron con unos 50 representantes del sector de automóvil de Cataluña a los que expuso el nuevo canal de interlocución y monitorización de la automoción.
