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Jim Farley, CEO de Ford / FORD

Jim Farley, CEO de Ford / FORD

Ahora Ford vale por cinco

Ford Europa desaparece, después de 55 años, diluida en cinco nuevas divisiones mientras Almussafes espera los nuevos modelos eléctricos

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Sergio Piccione

10.03.2022 00:00h

4 min

Después de 55 años de existencia, Ford Europa desaparece diluida entre las cinco divisiones -del One Ford de Mulally se ha pasado al Five Ford- que van a componer la nueva Ford Motor Company diseñada por Jim Farley, el discípulo aventajado de Juan José Díaz Ruíz en Toyota convertido en presidente ejecutivo (CEO) del gigante estadounidense.

Hace una semana, Farley había dejado caer su idea de separar la actividad de Ford como fabricante y vendedor de coches con motor de combustión interna y la de coches eléctricos, intentando atraer el interés de los inversores en Bolsa que siguen obnubilados por los llamados ‘nuevos jugadores’, ese grupo de fabricantes centrados en la producción de vehículos eléctricos de baterías que capitanea Tesla.

Nueva organización de Ford

En principio esto iba a dar lugar a dos nuevas divisiones denominadas Ford Model e, que asumiría las operaciones industriales de coches eléctricos, y Ford Blue, que se centraría en la continuidad de los vehículos con motor de combustión interna (gasolina y diésel). Pero cuando se perfeccionó la idea se optó por diseccionar a la compañía en cinco divisiones, añadiendo a las ya mencionadas Ford Pro, que asumirá los vehículos comerciales; Ford Drive, que se encargará de la actividad en empresas de movilidad; y Ford Credit, que continuará su actividad financiera.

En este nuevo escenario, los dirigentes de Ford han considerado que no tenía ningún sentido mantener las divisiones regionales como Ford Europa y a partir del próximo año, cuando la compañía pase de informar sobre los resultados, los que se hayan logrado en las diferentes regiones consolidarán dentro de la división para la que trabajen. 

Por un momento se temió que Stuart Rowley, hasta ahora presidente de Ford Europa, que como tal ha estado recientemente en España visitando el presidente del Gobierno y al de la Comunidad Valenciana, fuera ser una víctima de los cambios, pero no ha sido así. Ha sido nombrado responsable de asegurar la transición a la nueva estructura de la empresa y director de calidad, reportando directamente a Jim Farley. El papel de Rowley incluirá ayudar a reducir gastos para lograr ahorros de 3.000 millones de dólares en costos estructurales globales relacionados con el negocio de motores de combustión interna destinados a los modelos Ford Blue.

Ford busca subir en bolsa

En lo que se refiere a la división europea de Ford, todo parece indicar que se dedicará a trabajar para Ford Pro desde el centro técnico de Dunton, en el Reino Unido, y Ford Model e, para materializar los modelos eléctricos que se desarrollen en el centro técnico de Merkenich, junto a Colonia, en Alemania. De ahí deberían salir los dos modelos eléctricos cuya adjudicación podría asegurar la continuidad de la fábrica de Almussafes, en Valencia, que siempre ha sido considerada como una de las más eficientes de Ford en Europa y que podría aprovecharse de las baterías que se produzcan en la planta de Sagunto. Hay que recordar los acuerdos entre Ford y Volkswagen para vehículos comerciales y eléctricos.

La decisión de organizar la empresa en nuevas divisiones fue para permitir a los inversores ver la "creación de valor" entre cada una de las divisiones, dijo Lawler, el vicepresidente de Finanzas, tratando de eliminar ese cierto desprecio que estos tienen hacia las empresas tradicionales. De momento, el anuncio de la nueva organización de Ford ha sido bien recibida en Wall Street, aunque después de la subida inicial, el valor de Ford, punto débil de la misma en las dos últimas décadas, comenzó a bajar. 

Carlos Tavares, el consejero delegado de Stellantis, comentó el cambio de su competidor deseándole buena suerte. Pero señaló que lo veía como una operación para ganar valor en Bolsa mientras que él prefiere obtener el beneficio ofreciendo productos que satisfagan a sus compradores. Además, se planteó que entre los trabajadores de Ford Model e, supuestamente la división del futuro, y Ford Blue, podrían plantearse incertidumbres y malestares. Algo que ha obligado a Farley a contestar diciendo que la reestructuración pretende dar a Ford la capacidad de aprovechar los puntos fuertes de su experiencia en la fabricación y combinarla con los de una nueva empresa. 

 

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