El fiasco del centro de formación profesional de automoción de Cataluña llegará al Parlament. El Govern de la Generalitat tendrá que dar explicaciones sobre el bloqueo del centro de FP de Martorell en la sesión de control ante la pregunta presentada por el grupo parlamentario del PSC. 

El anuncio que hizo hace unos días el Clúster de la Industria de Automoción de Cataluña (CIAC) de que tiraba la toalla en su intento por resucitar las instalaciones de formación para futuros empleados del sector ha sentado como un jarro de agua fría en la oposición, especialmente en el PSC, con cuyo Gobierno se puso en marcha el proyecto que finalmente se inauguró con Artur Mas como presidente. 

El presidente del CIAC, Josep Maria Vall, cargó contra el bloqueo del centro debido a los desacuerdos sobre su gestión entre los departamentos de la Generalitat implicados dirigidos por ERC y por el PdeCAT. "Se ha desvirtuado completamente el centro y estamos perdiendo el tren", afirmó Vall, presidente del CIAC. La entidad, que agrupa a las principales empresas fabricantes, proveedores y de ingeniería y servicios de la automoción, ha iniciado gestiones para buscar su propia alternativa al centro de Martorell que puede pasar por convenios de FP dual con institutos. 

Pregunta en la sesión de control

A la vista del divorcio entre el sector y la Generalitat, la portavoz del grupo del PSC en el Parlament, Eva Granados, ha registrado una pregunta sobre los planes del Govern en relación con el centro de formación de Martorell para que sea respondida de forma oral en la sesión de control del miércoles 3 de abril.

El centro de FP del automóvil, que actualmente forma a 300 jóvenes a pesar de que tiene capacidad para 13.000, nació de un proyecto impulsado por la consejera de Treball Mar Serna que fue inaugurado por el Ejecutivo de CiU. Las instalaciones costaron 18 millones de euros.