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Shelby y Miles, los nuevos robots piloto de Ford

La marca utiliza dos conductores roborizados para llevar a cabo las pruebas de los coches en las condiciones climáticas extremas

Robot para pruebas extremas de Ford

José Del Barrio

11.08.2021 14:14h

2 min

Shelby y Miles son los nuevos fichajes estrella de Ford. Su trabajo consiste en conducir los coches de la marca en las pruebas de climas extremos. Su centro de trabajo se encuentra en el laboratorio meteorológico de Ford en Colonia (Alemania), donde se simulan climas extremos como los del Sáhara, Siberia o las montañas más altas.

En esas condiciones extremas de temperatura, humedad, presión atmosférica, los conductores humanos tienen que afrontar los elevados riesgos laborales con medidas extrardinarias de seguridad como tener botellas de oxígeno, equipos médicos disponiblres en el lugar y la monitorización de la salud de los pilotos. Ante esa situación y para evitar riesgos a los humanos, Ford ha decido 'fichar' a estos dos robots, qeu siguen los pasos de sus colegas Dummies, los maniquís con forma humana y múltiples sensores para las pruebas de choque.

Cada conductor robotizado es capaz de operar a temperaturas que van desde -40°C a +80°C, así como en altitudes extremas. Además, se puede configurar y programar para diferentes estilos de conducción. Las 'piernas' del conductor robotizado se extienden hasta los pedales del acelerador, freno y embrague, con un brazo colocado para cambiar de marcha y el otro utilizado para arrancar y detener el motor, ha señalado Ford.

Pruebas de laboratorio y reales

"Estos dos nuevos pilotos son fantásticos añadidos al equipo, ya que pueden enfrentarse a las desafiantes pruebas de resistencia a grandes altitudes y en temperaturas cálidas", ha declarado el supervisor de pruebas de túnel de viento en Ford Europa, Frank Seeling.

"Una vez que el robot está en el asiento del conductor, podemos ejecutar pruebas por la noche sin tener que preocuparnos de que el conductor necesitará un sandwich o un descanso para ir al lavabo", ha bromeado.

No obstante, Ford continúa realizando pruebas en el mundo real en lugares europeos y de todo el planeta, incluyendo la montaña Grossglockner en Austria y la región nevada de Arjeplog en Suecia. En esos casos, no queda otra alternativa que el piloto humano vaya bien equipado.

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