El Solterra, el primer eléctrico de Subaru, mantiene la esencia de la peculiar marca japonesa pese al nuevo sistema de propulsión, una excelente tracción integral y una especial preocupación por la seguridad. El nuevo Subaru Solterra, que se basa en una plataforma de Toyota, ha pasado la prueba de la sección Car Review & Rating de Coche Global.
El Subaru Solterra tiene una carrocería de tipo SUV y generosas dimensiones. Mide 4,69 metros de largo, con una batalla de 2,85 metros, 1,86 de ancho y 1,65 de alto. El ancho de vías es ligeramente mayor en el eje trasero, 1,61 metros, frente 1,60 delante. El maletero de 452 litros tiene bajo el piso un espacio para dejar los cables de recarga. La parrilla frontal cerrada lo hace inconfundiblemente eléctrico y la iluminación delantera y trasera es de led. La parte trasera está marcada por los dos pequeños alerones sobre la luneta trasera y los grandes difusores inferiores. Las llantas pueden ser de 18 o 20 pulgadas y Subaro ofrece seis opciones de colores para la carrocería.
Valoración del Subaru Solterra; diseño, 8,5; interior, 8,5; motor, 8,8; conducción, 8,8; global, 8,65.
Este modelo es el resultado de un desarrollo conjunto con Toyota, que posee el 20% del capital de Subaru. Está construido sobre la plataforma e-Tinga (e-Subaru, para esta marca) que comparte con los también 100% eléctricos Toyota bZ4X y Lexus RZ. Los tres modelos también son similares en sus líneas exteriores como el frontal muy facetados, las luces verticales, aunque el Solterra ha querido mantener algunos elementos propios y diferenciados como las suspensiones y su tradicional tracción AWD, permanente a las cuatro ruedas. Tampoco está previsto que Solterra incorpore la dirección electrónica, con volante recortado en la parte superior e inferior (similar al de los monoplazas de F1), que han anunciado Toyota y Lexus para 2025. Subaru quiere que en sus coches se sienta directamente la carretera.
Frontal del Subaru Solterra
Sistema eléctrico del Solterra
El Subaru Solterra está impulsado por dos motores eléctricos, uno en cada eje, ambos de 109 caballos, que le dan una potencia conjunta de 218 y un par máximo de 336 Nm. Están alimentados por con una batería de 71,6 kWh que tarda en cargarse 10,5 horas en un cargador convencional y 17 minutos en un cargador rápido. La autonomía facilitada por la marca es de 465 km (WLTP) con las llantas de 18 pulgadas del equipamiento de entrada y 414 km con las de 20 pulgadas de la versión más equipada.
El Solterra está disponible en dos terminaciones. Trek es la básica, aunque ya incluye un amplio equipamiento y se puede adquirir desde 46.750 euros (incluidos descuentos y ayudas Moves). Touring es la versión más equipada y su gama de precios arranca en los 57.900 euros.
Acelera de 0 a 100 en 6,9 segundos lo que da buena idea de su rapidez de respuesta cuando se presiona el acelerador. En carretera es muy agradable de conducir y no solo por su rápida respuesta. El bajo centro de gravedad, el contenido balanceo de la carrocería y la buena respuesta de la frenada, con un pedal muy modulable pese al peso del vehículo, consiguió que rápidamente me sintiera cómoda al volante y que los kilómetros que conduje en esta primera toma de contacto fueran muy agradables.
Buena impresión dentro del Solterra
El habitáculo es amplio, con aspecto de muy buena calidad y, sobre todo, de solidez. Se percibe que está diseñado y fabricado para durar, el 97% de los Subaru vendidos en la última década siguen rodando. Los asientos son confortables y con buen mullido, fáciles de ajustar con la ayuda de poder regular el volante para una perfectamente confortable posición de conducción. También hay un buen espacio en las plazas trasera, con bastante altura al techo, pese a que el diseño está ligeramente inclinado en la parte posterior.
Hay mucha luz en el interior fundamentalmente por el gran parabrisas que consigue una excelente visibilidad, hasta 7,7 metros del punto ciego en la superficie del asfalto, y por el techo panorámico de cristal en dos piezas. En el salpicadero, el protagonismo es para la pantalla central táctil de 12,3 pulgadas y, debajo, los controles de la climatización y el volumen del equipo de sonido. En un nivel inferior está el gran botón de arranque y las salidas del aire con el pulsador del warning en el centro. La colocación de los mandos es intuitiva y el tamaño los hace fáciles de localizar.
Al poder prescindir del eje de un cambio convencional, la consola central deja espacio para un gran compartimento para guardar cosas. En la parte más elevada está la rueda para seleccionar las marchas y las teclas de control de algunas de las funciones más importantes del coche, como los modos de conducción para carretera y todoterreno o la activación de la máxima potencia de frenado regenerativo. Las levas tras el volante permiten optar por una mayor o menor regeneración. En los vehículos eléctricos estos mandos que en el pasado eran sinónimo de conducción deportiva son ahora elementos de ahorro de consumo. Un poco más atrás hay un compartimento para la carga inalámbrica del teléfono, un espacio abierto para dejar cosas y el reposabrazos, también con un hueco interior.
El SUV eléctrico más bravo
No se puede considerar al Solterra como un todoterreno ‘puro’, pero desde luego es el más bravo de los que lucen la etiqueta 0. No cabría esperar otra cosa de Subaru, una marca que desde hace más de 50 años ha apostado por la tracción integral en todos sus turismos. Tiene una altura libre al suelo de 21 centímetros, con un ángulo de ataque de 17,7º, 25,4º de salida y 18,2º ventral lo que le permite superar con facilidad pequeños obstáculos y circular con mucha soltura por pistas.
El Solterra (nombre que combina las palabras latinas Sol y Terra) es un excelente todoterreno pese a lucir la etiqueta 0. Los responsables de Subaru creen que puede ser una alterativa ecológica para cazadores o para recorrer rutas por el campo teniendo en cuenta sus limitaciones de autonomía. Si no encontramos un poste de recarga en las carreteras más complicado va a ser localizarlo al lado de un árbol y no sirve de mucho llevar un bidón de combustible. Para la circulación off road el botón X-Mod permite seleccionar dos modos de conducción: Nieve/Tierra y Nieve profunda/Barro, que se suman a los programas básicos de conducción sobre asfalto (Eco, Normal y Power), también ajusta el funcionamiento del control de tracción y el pedal de aceleración. Las ayudas electrónicas y los cuatro motores permiten superar con sorprendente facilidad pistas y terrenos empedrados, barro y vadear ríos. También ayuda a controlar los descensos empinados evitando las pérdidas de adherencia.
Todo ello envuelto en un equipamiento de alta gama con el máximo equipamiento de sistemas de seguridad activa, preventiva y pasiva. Lleva siete airbags, por ejemplo. Subaru ofrece una garantía de cinco años o 100.000 km y de ocho años o 160.000 km para la batería.
