Si quieres comprarte un BMW X7, casi mejor que no sigas leyendo. Las pruebas del BMW X7 de carácter extremo a las que la marca alemana ha sometido al nuevo vehículo pueden herir tu sensibilidad. El nuevo SAV (Sport Activity Vehicle) ha superado las pruebas de temperaturas extremas bajo cero y en el desierto. Tú no le harías eso a tu coche. El nuevo BMW X7 ha probado sus aptitudes en el Círculo Polar Ártico, en la localidad sueca de Arjeplog, donde se alcanzan temperaturas extremas de 16 grados bajos cero. En ese entorno, BMW ha sometido a pruebas de conducción sobre hielo y sobre nieve.
Las pruebas del BMW X7 antes de su lanzamiento comercial
Antes de su presentación a final de 2018 y de su posterior lanzamiento comercial, el BMW X7 también ha tenido que superar las temperaturas del desierto de Suráfrica. Al mismo tiempo, el nuevo SAV ha sido sometido a pruebas en carreteras sinuosas y de carga así como en las calles de la ciudad.
El BMW X7 se fabrica en la planta de la multinacional en Spartanburg (Estados Unidos), desde donde se exportará a Europa y al resto de mercados. Sin embargo, el modelo puede verse afectado por los aranceles de la guerra comercial iniciada por Donald Trump. La factoría de BMW situada en Carolina del Norte está especializada en la producción para todo el mundo de la familia de modelos X de la marca. Cada día salen de la planta de Spartanburg un total de 1.400 unidades del modelo BMW X3, X4, X5 y X6, a los que se une ahora el X7.