Los fabricantes de automóviles se resisten a tirar la toalla en el diésel. Ante el anuncio de un aumento de los impuestos sobre el gasóleo, la Asociación de Fabricantes (Anfac) ha hecho un alegato en defensa del futuro del diésel y ha alertado de los efectos negativos que tiene el 'dieselazo' y la campaña de acoso y derribo contra esta tecnología. ¿Tiene los días contados tal como dijo la ministra de Transición Energética? Para los fabricantes de vehículos, hay para rato puesto que la demanda de coches con motores de gasóleo seguirá viva durante años. Sus previsiones apuntan a que la demanda de vehículos diésel será de 36 millones de unidades en 2025 sobre los más de 100 millones que se venden anualmente.
Anfac responde al 'dieselazo' anunciado por Pedro Sánchez
La patronal Anfac ha redactado un informe, que utiliza en sus negociaciones con las administraciones, en el que intenta demostrar que "las manifestaciones políticas en contra del diésel, en general, no responden a la realidad actual de esta tecnología y son perjudiciales, tanto para las ventas y para los consumidores como para la consolidación y transformación tecnológica de las fábricas españolas y su liderazgo mundial". Las marcas de automóviles han hecho público su posicionamiento después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciara un aumento de los impuestos sobre el diésel en los Presupuestos Generales del Estado de 2019. El anuncio descolocó a la ministra de Industria, Reyes Maroto, que poco antes se refería al incremento de la presión fiscal sobre el gasóleo como "rumores". "Una posible subida de los impuestos al carburante no puede estar justificada, en todo caso, por sus emisiones contaminantes. Los vehículos nuevos diésel emiten hasta un 84% menos de emisiones contaminantes NOx y un 90% menos de partículas que los automóviles de más de 15 años de antigüedad", indica Anfac. La persecución injustificada provoca, a juicio de Anfac, numerosos efectos adversos. La cuota de mercado de las ventas de coches nuevos diésel ha caído de enero a agosto en seis puntos, a pesar del leve respiro en agosto por los descuentos ofrecidos. De rebote, el valor de los vehículos diésel que se acaban de vender está cayendo drásticamente, según los fabricantes.
Efectos negativos del acoso y derribo contra el diésel
Además, el aumento de las ventas de coches de gasolina como alternativa está causando un aumento de las emisiones medias de CO2, que es el gas causante del efecto invernadero. En el terreno industrial, Anfac alerta de una pérdida de competitividad y de atractivo de las fábricas españolas junto a un mercado de coches eléctricos sometidos a muchos vaivenes. Los picos en la demanda por la disponibilidad o el agotamiento de las ayudas publicas puede afectar negativamente en la planificación de producción de 15 nuevos modelos que se empezarán a ensamblar en España en 18 meses. La alternativa que propone el sector del automóvil a Pedro Sánchez es un enfoque integral que recoja una fiscalidad nueva y más verde que fomente la renovación del parque; la armonización de las políticas de movilidad en todo el territorio español; el fomento del vehículo cero y bajas emisiones y el apoyo a las inversiones productivas, tecnológicas y de calado industrial. "El problema no es el diésel. Son los coches viejos que circulan por nuestras carreteras", ha afirmado Mario Armero, vicepresidente ejecutivo de Anfac.
