Ssangyong está haciendo una remodelación de su gama para conseguir competir con las generalistas. Ha empezado por el Korando, que se presentó en el pasado Salón de Ginebra, y por el Tivoli que poco a poco se va "europeizando" para satisfacer los gustos y solicitudes del público del viejo continente. No en vano, desde que en 2015 se presentó en el mercado, la marca surcoreana ya ha vendido más de 300.000 unidades de su SUV compacto. Hemos probado el Ssangyong Tivoli en el canal ARC Motor y en la sección Car Review & Rating de Coche Global y este es el resultado del test.

Este Tivoli presenta una ligera remodelación exterior con respecto a su predecesor, pero es en el interior y en las motorizaciones donde tenemos los cambios más importantes del modelo de Ssangyong.

Exterior del Ssangyong Tivoli

Si nos fijamos en el exterior, ha crecido 2,3 centímetros de largo para llegar hasta los 4,22 metros. También ha crecido 1,2 de ancho ( 1,81 m ) y 3,1 de alto ( 1,61 m ). No son muchos los cambios que vemos en la zona exterior, en algunos casos son más bien sutiles, pero hacen que este coche se adapte al nuevo lenguaje de diseño de SSangyong. Si miramos la zona frontal, los más evidentes que podemos observar son un nuevo diseño de la zona inferior del paragolpes, con unos antiniebla redondos en lugar de cuadrados y una nueva parrilla inferior que ahora ocupa todo el ancho del vehículo, además de la aparición de una línea cromada en la parrilla superior que une las dos ópticas.

En la trasera vemos unos nuevos grupos ópticos, más nuevos en su contenido que en su continente, que ahora presentan dos líneas paralelas verticales. Es también la zona inferior del parachoques la que presenta los mayores cambios, esta vez encontramos algo más de zona plástica, aunque los catadióptricos y el antiniebla siguen estando en la misma posición.   

Como os comentaba, el resto de cambios del coche son más bien sutiles y hay que conocer a fondo a su predecesor para darse cuenta de esos nuevos detalles que nos ofrece ya que las principales características de diseño, como los marcadísimos pasos de rueda y las líneas de los pilares se han mantenido. 

Ssangyong Tivoli por dentro

Si nos subimos al coche lo primero que nos llama la atención es el cockpit digital que adopta de su hermano mayor, el korando. Son 10,25 pulgadas y acompaña a la pantalla central de 8 pulgadas que queda en una posición correcta aunque yo hubiera preferido la pantalla por encima de los aireadores y no al revés como ocurre en este caso. En cuanto al cockpit digital, hace su trabajo, sin más. Es evidente que siempre será más atractivo y tecnológicamente avanzado que las agujas digitales pero siento honesto los gráficos y las presentaciones no son precisamente espectaculares, eso sí, tiene toda la información necesaria. La pantalla central ofrece grafías sencillas y poco atractivas pero el manejo es rápido e intuitivo. De la misma manera que la primera, no es la más avanzada que he visto pero hace su trabajo de manera eficiente. 

Siguiendo con el interior, casi todo lo que tenemos al tacto, tanto la zona del salpicadero como de las puertas, es plástico duro. Ninguno de ellos es desagradable al tacto y en realidad no es de extrañar si tenemos en cuenta que la mayoría de los segmento B tanto en utilitarios como en SUV utilizan materiales similares. Así pues, materiales sencillos, acabados correctos (a secas), una buena ergonomía y un intento (que se queda a medias) de modernizar los elementos más visuales del interior. 

El mayor problema 

En cuanto al espacio para los ocupantes, bastante correcto para tratarse de un SUV compacto, especialmente en las plazas traseras donde hay una muy buena distancia al techo y un espacio muy correcto para las piernas. Tres adultos pueden viajar de manera correcta, sin tirar cohetes. Y pueden hacerlo con esta comodidad en especial porque el suelo es muy plano y la persona que viaja en la plaza central no tiene necesariamente que abrir las piernas. Esto, sumado a la muy buena distancia al techo y a una anchura correcta da como resultado un coche cómodo para hacer un viaje largo. Como apunte por si alguien tiene esa duda...la zona curva en la que finaliza la ventana posterior no penaliza en absoluto la visibilidad del ocupante del asiento trasero. 

Y siguiendo con este tema, a continuación, el que para mí es el mayor problema de este coche: el maletero. Son 4 litros más que en el anterior para quedarse en 427. A priori la cifra no es mala, el problema viene con la forma. Es muy corto, en la cota de profundidad. De hecho, la bandeja cubremaletero hace solo un palmo de larga, para que os hagáis una idea. Una maleta hay que colocarla de canto y si es profunda igual no nos cabe. La banqueta de los asientos traseros tiene dos posiciones, de manera que se puede poner algo más recta para ganarle algo de espacio a la zona de carga, pero ese movimiento no parece arreglar en absoluto el problema de la forma.

Más motorizaciones

Un apartado en el que sí encontramos bastantes novedades es en el de las motorizaciones. Nos presenta el nuevo 1.5 T-GDI gasolina, de 4 cilindros, 163 CV y 280 Nm además del también nuevo 1.6 e-XDI diésel , de 4 cilindros, 136 CV y 300 Nm que utilitza también el aditivo  En breve llegarán las versiones de GLP a nuestro mercado, sobre la base del motor gasolina y con la ansiada etiqueta ECO. 

Ssangyong nos comenta que esta nueva oferta de motores, bastante más potentes que los anteriores por cierto, es más eficiente, pero lo cierto es que después de probar la versión de gasolina, puedo decir que la eficiencia no es su punto fuerte. Os costará bajar de los 8 litros, de hecho el consumo homologado por la marca es de 7,2 litros, así que ya os podéis imaginar que será muy difícil llegar a es cifra. A cambio, tenemos un motor con una muy buena respuesta en todo el rango de regímenes, de hecho me ha sorprendido la facilidad con la que hace aumentar la velocidad y con la que recupera desde abajo. No es excesivamente silencioso pero en absoluto transmite vibraciones en el habitáculo. La unidad que nos dejaron montaba el cambio automático AISIN de 6 relaciones. No funciona mal, pero es algo lenta en la transición entre relaciones y me ha parecido que no siempre cambia en el momento adecuado. En cualquier caso, si vuestra circulación habitual va a ser tranquila la suavidad sí es un punto fuerte de esta caja de cambios. Podremos optar también por una caja manual de 6 relaciones que de hecho es la que traen de serie las dos motorizaciones.

Como apunte, siempre tracción delantera, aún no se ofrece la integral 4x4 para este modelo.

Todos los acabados montan un selector de modos de conducción, y podremos elegir entre los modos normal, sport y winter. No entro en qué hace cada uno de ellos o no acabaremos nunca, pero sí os digo que a diferencia de otros coches, no cambia demasiado el comportamiento general. 

Y hablando de comportamiento: este es un coche orientado a la comodidad. Pese a ser un SUV no tiene un recorrido de la suspensión demasiado amplio pero esta sí es muy blanda, puede parecer en algún momento que el coche flota o balancea más de lo deseado. Teniendo en cuenta que el motor lo permite, un tarado algo más rígido sería perfecto por si queremos darnos alguna alegría en forma de carretera de montaña. Con la dirección me ha pasado algo parecido, muy cómoda pero no transmite demasiado, la sensación es de que puede llegar a flotar y de que no notas demasiado lo que ocurre en la carretera y además tampoco es demasiado directa pero oye, que esto es un SUV compacto y para su uso diario es muy correcta. Y cómoda.

Precio y acabados

Podemos comprar un SsangyongTivoli  desde 13.500 € con el acabado más sencillo, motor gasolina y cambio manual a los 23.300 € del acabado más alto con el motor diésel y el cambio automático. 

Podemos escoger entre 4 acabados: de abajo a arriba, Line, Urban, Premium y Limited, este último con elementos de serie como la cámara de visión trasera, la apertura y arranque sin llave y toda la conectividad y asistentes de conducción disponibles en la gama

También añaden algún elemento de equipamiento y algún color más a la gama con esta última remodelación pero si os interesa este Tivoli y vais a por él ya lo tendréis disponible así que no me extiendo en ese sentido. La pintura Bitono y los vinilos para personalizar el coche son dos de las opciones que Ssangyong nos ofrece y que hacen que este coche pueda resultarnos aún más atractivo. 

Conclusión sobre el Ssangyong Tivoli

Este Tivoli es un SUV relativamente económico que ofrece mucho por el precio que pide. Para aquel que esté buscando un vehículo de este tipo es una opción muy a tener en cuenta y si tú eres uno de ellos no dejes de pasarte por una concesión de la marca y de probarlo porque te puede sorprender. Otra cosa es que su diseño, algo particular, te convenza. En cualquier caso, para gustos...

Un motor potente, un muy buen equipamiento sobretodo en los acabados más altos y un confort de marcha elevado. A cambio tenemos unos materiales no demasiado cuidados y un consumo elevado.