Nissan echará un cable a Renault, su principal accionista, para impulsar su nueva filial de coches eléctricos Ampere, pero la ayuda será muy inferior a lo previsto. Nissan ha anunciado que ha acordado con Renault que invertirá hasta un máximo de 600 millones de euros en Ampere con el fin de tener una participación minoritaria y no tan estratégica como se había dicho tan solo unos meses antes en la firma del enésimo protocolo de la alianza entre Renault, Nissan y Mitsubishi en la era posterior a Carlos Ghosn, el todopoderoso presidente defenestrado.

Con la inversión anunciada de hasta 600 millones, Nissan se convertirá en un socio minoritario de Ampere, un estatus similar al del fabricante de procesadores Qualcomm. Esta inversión forma parte de la formalización de los acuerdos definitivos entre los tres miembros de la alianza automovilística, que enmiendan el protocolo marco de febrero para reequilibrar fuerzas y en el que Renault cede poder a Nissan y se compromete a no absorber el fabricante japonés, tal como quería Carlos Ghosn.

Del 15% al 6% de Ampere

En febrero pasado, las tres marcas asociadas firmaron un acuerdo marco que preveía que Nissan hiciera una inversión para ostentar el 15% de Ampere. Ese acuerdo levantó ampollas en la cúpula de Nissan, en la que el consejero delegado, Makoto Uchida, llegó a espiar a su mano derecha, el jefe de operaciones, Ashwani Gupta, que finalmente fue despedido. Posteriormente se conoció que Gupta se manifestó en contra de que Nissan comprara el 15% de Ampere. 

Finalmente, el porcentaje que tendrá Nissan en Ampere se estima alrededor del 6% teniendo en cuenta que la división se valora en unos 10.000 millones de euros. A pesar de las ansias de poder de Nissan y de tratar a Renault como a un igual en lugar de su principal accionista, el fabricante japonés se aleja de la aventura eléctrica del grupo francés, cuyo consejero delegado, Luca de Meo, ha emprendido una estrategia que busca financiación mediante nuevos socios.  

Pese a la rebaja de la participación, Nissan tendrá derecho a un sillón en el consejo de administración de Ampere, lo que ha llevado a las dos compañías calificar el papel de la japonesa de "inversor estratégico". Con el nuevo acuerdo, el consejero le saldrá más barato a Nissan.

Otra cesión de Renault a Nissan

Las tres marcas implicadas en la alianza han ratificado los términos para equiparar las participaciones cruzadas pero con una cesión relevante por parte de Renault. La marca francesa no podrá hacer uso del derecho de voto sobre el 28,4% del capital de Nissan, que está depositado en un fideicomiso a la espera de su venta, en al que la japonesa tendrá derecho de atnteo. En el acuerdo de febrero, Renault se reservaba el derecho de voto, con los que el reequilibrio accionarial era poco más que un maquillaje temporal. 

Con la neutralización de los derechos de ese 28,4% del capital, Renault y Nissan tendrán voto sobre la participación del 15% cruzada. Renault tiene un 43% del capital de Nissan desde la época en la que Carlos Ghosn formalizó la alianza que ahora se está deshaciendo. 

Los directivos prometen más valor

Los acuerdos definitivos firmados ahora entre los tres socios de la alianza incluyen una serie de "proyectos operativos con fuerte creación de valor" en India, Latinoamérica y Europa y "permiten entrar en un nuevo capítulo de la alianza", según el presidente y jefe del consejo de administración de Renault, Jean-Dominique Senard, que considera que saldrá "reforzada" y sentará las bases de "una nueva gobernanza equilibrada, justa y eficaz".

Makoto Uchida destacó la colaboración será "mutuamente beneficiosa" en áreas de innovación de interés común, y añadió que la inversión en Ampere "complementa y fortalece el impulso continuo de electrificación de Nissan en Europa y generará numerosas sinergias", como reducción de costes, el cumplimiento de normativas y productos y sistemas eléctricos, señaló el ejecutivo nipón. El día antes, Nissan presumió de haber vendido un millón de vehículos eléctricos en 13 años, desde el lanzamiento del primer Leaf.

Luca de Meo subrayó el "potencial de generación de valor que se cifra en cientos de millones de euros" para las tres empresas y para sus socios.