La dirección de la fábrica de Volkswagen de Navarra ha alcanzado un preacuerdo con la mayoría sindical formada por UGT y CCOO sobre el convenio colectivo de la transición hacia la electrificación. El preacuerdo prevé la garantía de subidas de sueldo iguales al IPC y un premio en 2026, al final del periodo de introducción de los nuevos modelos eléctricos en la fábrica de Volkswagen de Pamplona.


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Después de las últimas ofertas planteadas por la compañía, que iban en la dirección reclamada por los sindicatos, se ha firmado un preacuerdo con UGT (13 delegados) y CCOO (8), que representan el 67,7% del comité de empresa, en el que también tienen representación ELA (5), LAB (3) y CGT (2). El preacuerdo firmado se someterá a la votación de la plantilla en un referéndum.

Votación de la plantilla

"Estoy convencido de que la plantilla valorará positivamente el texto porque es un buen preacuerdo para los trabajadores. Se ha hecho un esfuerzo por las dos partes, que agradezco, para llegar a un entendimiento basado en condiciones reales aplicables en nuestra empresa. El preacuerdo incluye garantías de empleo, poder adquisitivo y futuro", ha asegurado el gerente de Relaciones Industriales de la compañía, Jesús Galindo Parejo. 

El convenio prevé un incremento salarial igual al IPC de 2024 a 2026 así como unos pagos adicionales que suman 900 euros repartidos en 200, 300 y 400 en 2024, 2025 y 2026, respectivamente. El desembolso de los 400 euros estaría vinculado al cumplimiento de la curva de lanzamiento de los dos coches eléctricos, que se producirá en este último año, según informó Volkswagen Navarra. 

En otro de los temas sensibles, VW presentó uina propuesta para la “no introducción en el año 2024 de las contingencias comunes a través de mutua”. El compromiso de Volkswagen consiste en dejar el control de las bajas al margen de la mutua siempre que se reduzca el índice de absentismo laboral de la plantilla. 

Excedente de 400 empleos

De forma paralela al convenio, la dirección de VW y el comité negocian las fórmulas para hacer frente al excedente de unos 400 empleos que se generará en 2024 durante el bache de producción por la introducción de dos modelos eléctricos en las líneas de montaje. La compañía se ha comprometido a mantener el nivel de empleo actual, de unos 5.000 trabajadores, cuando finalice la transición en 2026. 

Los sindicatos UGT y CCOO habían pedido mantener la producción de coches de combustión el máximo posible para garantizar más volumen de fabricación y afrontar el excedente de plantilla con medidas como un ERTE, formación, calendarios de transición. Al mismo tiempo, Volkswagen Navarra pondrá en marcha un plan de contratos de relevo para rejuvenecer la plantilla, así como de bajas voluntarias y el plan de salidas incentivadas voluntarias y mediante acuerdo.