Con un coste laboral por vehículo de tan solo 106 dólares -98 euros-, Marruecos se posiciona como el país con una mano de obra más económica del planeta. Esto era algo que barruntábamos -todavía recordamos cuando Carlos Tavares hablaba hace unos años de que el norte de África estaba ya al mismo nivel de costes que China- y que sin duda se puede convertir en un imán para la inversión extranjera en este país, como ya han descubierto fabricantes franceses -el coche más vendido en nuestro país, el Dacia Sandero, se fabrica al otro lado del Estrecho-.

Pero este posicionamiento laboral en base a costes lo debemos considerar pura estrategia si sumamos, además, proximidad logística a Europa, tratados de este país de libre comercio con la Unión Europea, Estados Unidos, África… una cualificación laboral que mejora, estabilidad energética sin dependencias externas y gobierno marroquí focalizando en desarrollar una industria competitiva, moderna y descarbonizada…  El resultado es que Marruecos ya no es una simple alternativa de bajo coste, sino de coste inteligente, máxime en un contexto de tensiones geopolíticas donde este país parece vivir en una aparente paz.

Los países más y menos caros en automoción

El informe de Oliver Wyman, que analiza más de 250 plantas de fabricación de vehículos en todo el mundo, subraya que los costes laborales son un factor clave en la competitividad de las empresas automovilísticas. El podio de coste laboral lo completan Rumanía y México con, respectivamente, 251 y 281 euros por vehículo. Cuarta posición para Turquía con 381 euros por vehículo fabricado. Y seguro que estás echando en falta al gran referente mundial, China.

Ranking de coste laboral por vehículo

Quinta posición registrando un coste de 549 euros por vehículo -sube el 24 por ciento en los últimos cinco años-, aunque conviene recordar que su producción supone un tercio del total mundial. España, el segundo mayor productor de automóviles en Europa, alcanza los 879 euros, habiendo reducido sus costes un 17 por ciento en los últimos cinco años para lograr mayor competitividad, a la vez que se mantiene cualificación y eficiencia.

El estudio de Oliver Wyman también hace una clasificación de los fabricantes/factorías en cuatro grupos según categorías del producto para ofrecer costes laborales por tipología de coche: premium europeos (1.897 euros por vehículo), fabricantes de eléctricos (1.411 euros), productores de modelos generalistas (748 dólares) y fabricantes chinos (497 dólares). Esta segmentación muestra cómo las estrategias de producción y los costes laborales definen el panorama competitivo global impactando directamente en la rentabilidad de las compañías y en las decisiones de adjudicación de nuevos proyectos a sus fábricas.