El sector del metal de la provincia de Barcelona, que engloba buena parte de los proveedores de automoción, se prepara para una huelga los próximos 29 y 30 de octubre, después de que las negociaciones del convenio provincial permanezcan encalladas. Los sindicatos CCOO de Industria y UGT FICA de Cataluña han registrado la convocatoria y han exigido a la Unión Patronal Metalúrgica (UPM) “seriedad” en la mesa para alcanzar un “acuerdo digno”.
La falta de avances en la negociación de un convenio que afecta a 200.000 trabajadores y 14.000 empresas ha llevado a los sindicatos a endurecer sus posiciones. “O se ponen serios en la mesa de negociación y empiezan a hacer propuestas que nos permitan alcanzar un acuerdo digno, o los días 29 y 30 los trabajadores del sector del metal pararán al 100 %”, ha advertido Javier Rubio, responsable de negociación colectiva de CCOO de Industria en Cataluña, en declaraciones a Efe.
Salarios, jornada y absentismo
Las centrales sindicales reclaman una actualización salarial acorde con la subida del coste de la vida, así como una reducción de la jornada laboral para acercarse a las 37,5 horas semanales, en línea con la propuesta del Ministerio de Trabajo rechazada en el Congreso. “Nos están haciendo propuestas económicas que no tienen nada que ver con la situación que vive el país, con los incrementos de alimentos o hipotecas”, ha subrayado Rubio.
En la misma línea, Bernardo Fuertes, secretario del sector siderometalúrgico de UGT FICA Cataluña, ha acusado a la patronal de buscar “únicamente eliminar derechos y aumentar beneficios empresariales, a costa de los trabajadores y trabajadoras”.
La respuesta de la patronal
El presidente de la UPM, Jaume Roura, ha defendido, en un editorial, que la negociación debe equilibrar las demandas laborales con las necesidades de las empresas. “Por un lado, los sindicatos aprietan mucho y hay que encontrar soluciones asumibles para las empresas”, ha señalado, subrayando además la necesidad de reducir el absentismo y garantizar la productividad. Roura se ha mostrado confiado en que se pueda alcanzar un acuerdo antes de la fecha fijada para la huelga, aunque ha reconocido la complejidad del proceso.
Mediación de la Generalitat
Los sindicatos esperan que el Departamento de Empresa y Trabajo, dirigido por el 'conseller' Miquel Sàmper, convoque en los próximos días una mediación obligatoria. “Estamos dispuestos a sentarnos y seguir hablando cuando se nos convoque. Lo que no se puede es perder el tiempo sin avanzar”, ha insistido Rubio.
El conflicto en el metal de Barcelona se enmarca en un contexto económico de incertidumbre, con previsiones de crecimiento del PIB español en torno al 2,6 % en 2025, superiores a las de la zona euro, pero con tensiones en el tejido industrial.