El veto a los coches diésel en Baleares a partir de 2025 ha quedado en suspenso. El Govern de las islas ha aprobado dejar sin efecto de forma temporal la disposición de la ley de cambio climático que impedía la circulación de vehículos con motor de gasóleo a partir de 2025, lo que suponía adelantarse al resto de comunidades autónomas y a las previsiones del Gobierno central. 

El Gobierno central y el de Baleares han alcanzado un acuerdo en relación con la Ley de cambio climático y transición energética que fue aprobada hace tan solo unos meses. El acuerdo se ha alcanzado en la Comisión bilateral de cooperación convocada de oficio como paso previo para que la discrepancia llegara al Tribunal Constitucional. 

Esta decisión ya fue adelantada por el secretario de Industria en funciones, Raül Blanco, en su intervención en un encuentro de automoción en IESE Barcelona. El Gobierno de Madrid se compromete a tener en cuenta las singularidades de Baleares en la ley de cambio climático estatal, cuyo proyecto quedó paralizado por la convocatoria de elecciones generales.  

Competencias del Estado

Según el Ministerio de Política Territorial y Función Pública, el acuerdo ha sido fruto de la voluntad de cooperación de ambos gobiernos. La medida se debe a que el veto a aprtir de 2025 "invade competencias exclusivas del Estado" en lo referente a regulación en materia de tráfico y circulación de vehículos a motor y el establecimiento de las bases y coordinación de la planificación general de la actividad económica.

Sin embargo, el vicepresidente y 'conseller' de Transición Energética y Sectores Productivos de Baleares, Juan Pedro Yllanes, ha detacado en el Parlament autonómico que "se mantiene el texto de la norma. No se reclama ni la reforma ni la derogación que han motivado divergencias entre ambas administraciones. Y se mantiene la fecha del 1 de enero de 2025 como fecha de inicio de la limitación del diésel en las Illes Balears”. Eso sí, el calendario queda en suspenso.

 

El sector pide un marco general

Anfac valora "positivamente" la suspensión porque se debe contribuir a eliminar la "incertidumbre" provocada entre los consumidores por esta "prohibición taxativa" y que está afectando "negativamente" a las ventas de vehículos. El vicepresidente ejecutivo de la asociación, Mario Armero, resaltó que el reto del cambio climático y de la mejora de la calidad del aire necesita una cohesión territorial y de una regulación adecuada para alcanzar sus objetivos.

La Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto) ha destacado este martes la necesidad de un "enfoque de país" y una "uniformidad territorial" para abordar la descarbonización de la movilidad y el cambio climático. Ha considerado "clave" el reconocimiento de que cualquier limitación a la circulación por el territorio nacional o de una comunidad "no es competencia autonómica, sino del Estado".

En este sentido, Faconauto ha esperado que las futuras regulaciones de ámbito nacional que se aborden "se hagan de acuerdo con el camino que está marcando la Unión Europea, que apuesta por la reducción de emisiones de los vehículos se haga de manera progresiva y sin prohibiciones".