El año 2026 arrancará con importantes novedades en materia de movilidad y seguridad vial en España. Más allá de la ya conocida obligatoriedad de la baliza V16 conectada, que sustituye definitivamente a los triángulos de emergencia, el próximo 1 de enero entran en vigor nuevas normas de la Dirección General de Tráfico (DGT) que afectarán a la forma de conducir tanto en ciudad como en carretera.

Así lo recuerdan los expertos de Alquiber, empresa especializada en renting flexible de vehículos, que alertan de que muchas de estas medidas han pasado desapercibidas pese a su impacto directo en millones de conductores.

Más restricciones en las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE)

Uno de los cambios con mayor impacto ciudadano será el endurecimiento de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE). En 2026, todas las ciudades de más de 50.000 habitantes, así como los territorios insulares, deberán tener plenamente implantadas estas zonas, lo que afecta a más de 149 municipios y a cerca de la mitad de la población española.

Las restricciones se basan en la etiqueta ambiental de la DGT, limitando el acceso de los vehículos más contaminantes, especialmente los gasolina anteriores a 2001 y los diésel anteriores a 2006. El incumplimiento puede acarrear multas de hasta 200 euros, reducidas a 100 por pronto pago.

Los vehículos con etiqueta B y C suelen tener acceso limitado a las zonas más protegidas, mientras que los ECO y Cero mantienen plena libertad de circulación y estacionamiento, además de bonificaciones. No obstante, cada ayuntamiento puede aplicar criterios propios dentro de su ZBE.

Madrid prorroga la moratoria para vehículos sin etiqueta

En el caso de Madrid, estaba previsto que a partir de enero de 2026 finalizara la moratoria para los vehículos sin etiqueta ambiental, impidiéndoles circular por todo el municipio, incluida la M-30. Sin embargo, el Ayuntamiento ha aprobado una nueva prórroga hasta el 31 de diciembre de 2026 para los vehículos sin distintivo empadronados en la ciudad, argumentando su reducido impacto ambiental en comparación con el conjunto del tráfico.

Cinturón de seguridad: obligación universal en ciudad

Una de las novedades más relevantes es la universalización del uso del cinturón de seguridad en vías urbanas. A partir de 2026 desaparecen las excepciones vigentes hasta ahora para determinados colectivos profesionales, como taxistas, repartidores o profesores de autoescuela, que deberán utilizar el cinturón en todo momento durante su actividad laboral.

Con esta medida, la DGT busca reforzar la seguridad en ciudad, donde se concentra una parte significativa de los accidentes con víctimas.

Adelantar vehículos averiados: nuevas reglas

También cambia la forma de adelantar a vehículos detenidos en la calzada por avería o incidencia. Cuando un coche inmovilizado ocupe total o parcialmente el carril, el conductor deberá reducir su velocidad en 20 km/h respecto al límite de la vía y mantener una distancia lateral mínima de 1,5 metros durante la maniobra.

Esta norma pretende mejorar la protección de los ocupantes del vehículo averiado y de los operarios que puedan estar actuando en la vía.

El carril de emergencia, obligatorio en retenciones

Otra medida que se convierte en norma general es la creación de un carril central de emergencia en retenciones de autopistas y autovías. En caso de atasco, los vehículos del carril derecho deberán desplazarse hacia la derecha y los del carril izquierdo hacia la izquierda, dejando libre un espacio central para permitir el paso rápido de ambulancias, bomberos y otros servicios de emergencia.

Esta práctica, ya habitual en países europeos y popularizada en redes sociales, pasa ahora a ser obligatoria en España.

Cambios en el examen teórico del carné de conducir

El acceso al carné de conducir también se moderniza. A partir de enero de 2026, los exámenes teóricos de la DGT incorporarán vídeos de percepción del riesgo, una medida inspirada en modelos de países como Reino Unido o Francia.

Los aspirantes deberán analizar situaciones reales de tráfico y decidir cómo actuar ante posibles peligros, como peatones cruzando inesperadamente, vehículos averiados o condiciones meteorológicas adversas. El objetivo es dejar atrás el aprendizaje basado únicamente en memorizar test y reforzar la anticipación y la toma de decisiones al volante.