La compañía de renting de vehículos ALD Automotive ha anunciado que no va a concluir ninguna nueva transacción comercial en Rusia, un mes y medio después del inicio de la guerra de Ucrania. La medida se debe a la decisión del banco Société Générale, su principal accionista, de vender sus filiales en Rusia en respuesta a la invasión de Ucrania.  


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Société Générale ha suscrito un acuerdo para vender la totalidad de su participación en Rosbank y las filiales de seguros rusas de la entidad a Interros Capital, el anterior accionista de Rosbank, fundado y dirigido por Vladimir Potanin, considerado la mayor fortuna de Rusia, tras lo que el banco francés asumirá un impacto adverso de unos 3.000 millones de euros.

La transacción con Interros Capital, que supone el cese de la actividad de Société Générale en Rusia, está sujeta a la aprobación de las autoridades reguladoras y antimonopolio pertinentes y podría cerrarse en las próximas semanas. "Con este acuerdo, concluido tras varias semanas de intenso trabajo, el grupo saldría de forma eficaz y ordenada de Rusia, asegurando la continuidad de sus empleados y clientes", ha informado el banco francés.

Operaciones de ALD en Rusia

ALD, que opera en Rusia a través de su sucursal en Kazajistán, proporciona servicios de arrendamiento y gestión de flotas en 43 países a sus clientes, siendo la gran mayoría profesionales de grandes corporaciones y pymes. Según cifras del último trimestre de 2021, ALD cuenta con una flota de 1,73 millones de vehículos y 6.700 empleados en todo el mundo.

Varias empresas automovilísticas habían detenido su actividad en Rusia desde el estallido del conflicto a finales de febrero. Compañías como Ford, Renault o Toyota dejaron de vender vehículos en Rusia, al mismo que se plantearon vender sus participaciones en el país, una decisión a la que ahora se suma ALD. 

En la actualidad, Rusia es el décimo fabricante mundial de coches, aportando 1,4 millones de unidades al mercado, según cifras de 2020. En lo que se refiere a materias primas, Rusia y Ucrania son piezas clave para el sector de la automoción ya que son las principales fuentes de paladio, gas neón y del cableado de catalizadores y semiconductores.