La 'startup' británica Switch Mobility, perteneciente al grupo indio Hinduja, ha llegado a Valladolid con la alfombra roja de las administraciones. El consejero delegado de la compañía, Andy Palmer, ha presentado un proyecto con unas cifras llamativas: promete crear hasta 7.000 empleos con una inversión de solo 100 millones repartida en 10 años para abrir una fábrica de autobuses y furgonetas eléctricos.

Andy Palmer ha asegurado en la presentación del proyecto que el día 27 de enero de 2022 comenzarán las obras de la nave y que a final del año próximo se producirán las primeras unidades de un modelo de bus sin emisiones de 12 metros de largo. A partir de 2024 se sumarán a la línea de producción las furgonetas urbanas eléctricas de la marca. 

Palmer no ha concretado la cifra de ayudas públicas a la que aspira este proyecto, pero se ha deshecho en elogios del Ayuntamiento de Valladolid y de la Junta de Castilla y León. Ha indicado que la prioridad de la compañía no son los "incentivos" que las instituciones puedan aportar, sino la ubicación, la plantilla, las piezas y la demanda esperable. Estas ventajas junto a la cálida bienvenida dada a Palmer cuando se planteó el proyecto en abril han sido elementos decisivos para elegir Valladolid antes que otras ciudades que se ofrecieron para acoger la inversión, según ha explicado el CEO de Switch Mobility.

 

Proyecto escalable

El directivo no ha concretado qué ciudades competían con Valladolid para albergar esta fábrica de vehículos eléctricos. Mientras negociaba con Valladolid, Palmer también estaba proponiendo otro proyecto para producir camionetas de hidrógeno en la planta de Nissan de Barcelona, que conoce bien por su etapa como director de operaciones de la multinacional en Europa. En el proyecto que proponía en representación del proveedor belga Punch planteaba una inversión inicial de 50 millones y unas ayudas públicas de 150 millones.

En el caso de Valladolid, con esa inversión de 100 millones en 10 años plantea crear 2.000 empleos directos y otros 5.000 indirectos en proveedores. Pero Palmer no ha concretado sus planes de producción con el número de vehículos en ese periodo. Se ha limitado a explicar que el proyecto será "escalable" y dependerá "francamente" de la "ambición" de los políticos españoles y de su apuesta por la movilidad eléctrica en el transporte en autobús.

 

Switch Mobility anunció recientemente un plan para invertir hasta 200 millones de dólares (177 millones de euros) en los próximos años para lanzar nuevos modelos de vehículos eléctricos y abrir nuevos centros de producción en la Unión Europea. De momento, Switch Mobility ha vendido 300 vehículos eléctricos y ha invertido 130 millones de dólares (115 millones de euros).