Cupra pone rumbo a Estados Unidos en su próxima etapa de expansión. Después de que los nuevos modelos hayan entrado ya en Australia, el siguiente capítulo será en Norteamérica. Wayne Griffiths, el CEO de la marca, ha anunciado que Cupra está ultimando los preparativos para lanzar nuevos modelos en Estados Unidos, para lo que estudia la producción en alguna planta de Volkswagen en Norteamérica. Paralelamente, ha reiterado que la marca Seat seguirá con los coches de combustión.

La marca del grupo Seat ha realizado ya pruebas para comprobar la aceptación de sus modelos entre los clientes potenciales en California que han dado unos resultados "realmente alentadores", según ha explicado Griffiths durante la presentación en el espacio de Cupra en el centro de Múnich en el marco del Salón IAA Mobility de la ciudad alemana.

En el otro lado de la moneda, la marca Seat seguirá con la producción de coches de gasolina e híbridos hasta "el final de la era de la combustión", según indicó Seat en respuesta a algunas infoemaciones que avanzaban el final de la histórica marca española nacida en los años 50. Para Griffiths, la producción de modelos de Seat ayudará a la planta de Martorell en la transición a la plena electrificación, fijada en Europa para 2035. De momento, la empresa trabaja en definir el futuro de la marca Seat, que se centrará en la movilidad urbana.

Nuevos modelos eléctricos

La estrategia de Cupra en su camino para relevar a Seat pasa ahora por determinar la cartera de modelos con los que desembarcará en EEUU, que serán todos eléctricos. Hasta ahora, Cupra cuenta con el Born como modelo 100% eléctrico y prevé lanzar el SUV coupé grande Tavascan y el híbrido Terramar en 2024, así como el pequeño urbano Raval en 2025. Sin embargo, el desembarco de Cupra en EEUU se hará con nuevos modelos que se adapten a los gusto por los vehículos de grandes dimensiones, según ha avanzado el directivo en un encuentro con periodistas españoles en Múnich.

Cupra se plantea aprovechar las sinergias dentro del grupo Volkswagen mediante la producción de sus modelos en plantas del consorcio en la Norteamérica. Aprovecharía las plataformas de vehículos grandes que se producen en la región. De esa manera, la marca española se ahorraría costes logísticos y aranceles de las exportaciones desde Europa a EEUU y se podría beneficiar de los importantes incentivos que ofrece el Gobierno de Joe Biden para impulsar la electrificación. 

Al mismo tiempo, Cupra prepara cuál será su estrategia de distribución en un país tan grande como EEUU, en el que hay zonas como California, Florida, Nueva York y Washington en las que la movilidad eléctrica está más desarrollada.

El "siguiente nivel" de Cupra

"Es el momento de pensar cómo vamos a llevar Cupra al siguiente nivel. Hay que pensar más allá con el DarkRebel, que es la expresión máxima de lo que puede hacer esta marca y su ambición. Podría ser un icono de la marca", aseguró el CEO y presidente de Cupra y Seat. En esa estrategia se enmarca también el salto a EEUU, que depende de la decisión final que se tome este año en función de las perspectivas de rentabilidad de una inversión que sería cuantiosa.

"Es un gran paso, un gran reto para cualquier marca. EEUU es uno de los mercados más difíciles del mundo. Tenemos que probar que la marca está funcionando y tener un portfolio que funcione en EEUU, donde se venden coches más grandes que los de España. Si quieres ganar dinero tienes que fabricar en EEUU", ha afirmado Wayne Griffiths.

Mejorar la rentabilidad

Por eso, el objetivo prioritario ahora para Seat es lograr una rentabilidad por encima del 5% sobre la facturación para lograr los recursos necesarios para esas inversiones de futuro. En la primera mitad del ejercicio, Seat S.A., propietaria de Cupra y de la marca Seat, logró un beneficio operativo de 371 millones de euros. El impulso de Cupra, que ya ha vendido más de 400.000 vehículos desde su nacimiento como marca independiente en 2018, ha sido clave para impulsar la facturación y la rentabilidad. En 2023 acumula un crecimiento del 60% con más de 150.000 vehículos vendidos. 

Pero Griffiths ya piensa más allá de EEUU. Considera que la entrada en ese mercado puede ayudar a que Cupra dé el salto a otros países. Por ahora, China se mantiene al margen debido a la estrategia del grupo Volkswagen, que en el país asiático tiene una cuota de ventas del 20% frente al 5% en EEUU. Eso a pesar de que Volkswagen aprovechará el Cupra Tavascan para venderlo en China con su propia marca teniendo en cuenta que el modelo se fabrica en el país asiático.