Barcelona y Sitges han vuelto a retoceder unos 100 años en el tiempo, hasta principios del siglo XX, gracias al retorno del rally de coches de época. Unos cincuenta coches históricos y una docena de motos, que incluía algunas joyas venidas de fuera de España, y sus ocupantes ataviados con ropa de época han obrado el milagro de recuperar el ambiente de los pioneros de la automoción

El 64 Rally Barcelona-Sitges de coches clásicos se ha podido volver a celebrar tras dos años de parón por la covid. El acontecimiento, declarado Fiesta de Interés Turístico Nacional, ha vuelto a congregar a centenares de aficionados y curiosos, que se han concentrado a lo largo del recorrido para ver desfilar auténticas joyas automovilísticas.

Coches fabricados hasta el año 1928 y motocicletas hasta 1938 han vuelto a recorrer las principales vías que unen Barcelona y Sitges, entre ellos varios vehículos extranjeros, procedentes de países como Reino Unido o Italia. Todos ellos han podido circular por la Zona de Bajas Emisiones de Barcelona gracias al permiso especial por ser vehículos clásicos.

Coches clásicos únicos

Entre los vehículos que han participado en el Rally figuran un Ford Modelo T de 1926, considerado el primer superventas de la historia del automóvil; un Panhard-Levassor X19 de 1913, del que solo sobreviven 35 unidades en todo el mundo; un Rolls-Royce Phantom I Myfair de 1926 o un Rolls-Royce Phantom I Saint Andrew, modelo que utilizó en su día el periodista Oscar Odd McIntyre, colaborador del New York Times. 

Los participantes han salido a las 10:30 horas de la plaza de Sant Jaume de Barcelona y han puesto rumbo a Sitges pasando por los municipios de L'Hospitalet de Llobregat, Cornellà, Sant Boi, Viladecans, Gavà y Castelldefels. La última etapa del trayecto antes de llegar al destino se ha realizado por la popular carretera de la costa del Garraf.