Este martes día 20 de julio ya ha pasado a la historia como el segundo día con la luz más cara. En solo un día, las tarifas han subido un 3% y convierten el imprescindible consumo de electricidad en algo prohibitivo para operaciones como, por ejemplo, cargar las baterías de un coche eléctrico

El precio medio de la luz en el mercado mayorista ha alcanzado su récord anual y el segundo más caro de la historia, superando la cota de los 101 euros por megavatio hora (MWh). El 'pool' eléctrico registrará para mañana un precio medio de 101,82 euros por MWh, superando así por primera vez en lo que va de 2021 la barrera de los 100 euros por MWh como media diaria.

Estos niveles de precio medio diario tocados en julio en varias ocasiones superan incluso ampliamente los casi 95 euros por MWh que se registraron el pasado 8 de enero en medio de la tormenta Filomena.

Fuentes del sector consultadas por Europa Press atribuyeron este máximo a una combinación de factores, como son los precios del gas y de los derechos de emisión de CO2, que están marcando la tendencia alcista en el 'pool' en los últimos meses, unido a la menor contribución de las renovables en el 'mix'. A ellos se unen también las altas temperaturas en este inicio de semana, que superarán en varios lugares del país los 40 grados centígrados, que llevará a un repunte de la demanda -la energía negociada prevista para este martes es de 531 gigavatios hora (GWh)-.

 

13,38 euros por cargar un eléctrico

En términos domésticos, el pico en el precio que se paga por la electricidad será de 0,26773 euros por kWh de 9 a 10 de la noche, mientras que la tarifa más baja ha sido de 0,12171 euros por kWh de 3 a 4 de la madrugada. El precio máximo se acerca así al que suelen cobrar algunas operadoras en puntos de carga públicos.

Para cargar una batería media de un coche eléctrico con una capacidad de 50 kWh, nos costaría 13,38 euros para tener una autonomía de 300 a 400 kilómetros en función del modelo. Más barato que llenar un depósito de gasolina, pero mucho más caro que recargar en la hora más barata de la madrugada, que costaría seis euros. 

El único consuelo para suavizar este golpe es la rebaja fiscal aprobada por el Gobierno el pasado 24 de junio, que supone reducir el IVA de la luz del 21% al 10% hasta finales de este año y la suspensión del impuesto del 7% a la generación eléctrica durante tres meses. En el caso concreto del IVA, se aplica una bajada al 10% hasta fin de año para todos los consumidores con potencia contratada hasta 10 kilovatios (kW), siempre que el precio medio mensual del mercado mayorista de la electricidad esté por encima de los 45 euros por megavatio hora (MWh).

Subidón en la factura de julio

A pesar de estas medidas, la factura de la luz de un usuario medio se ha encarecido un 34,6% en la primera quincena de julio con respecto al mismo mes del año pasado, según datos de Facua-Consumidores en Acción. Según estimaciones de la asociación de consumidores sobre la evolución de la tarifa semirregulada (PVPC), de seguir así las tarifas, la factura mensual se situaría en 84,35 euros, un importe del recibo aún más elevado que el de junio, cuando fue de 81,27 euros.

Con las tarifas de los 15 primeros días de este mes, el usuario medio pagará 21,68 euros más que en julio de 2020, cuando la factura se situó en 62,67 euros. La asociación estima que la bajada del IVA al 10% hasta diciembre mientras el precio medio del megavatio hora esté por encima de los 45 euros ha amortiguado la subida en 8,44 euros. Si se siguiera aplicando el 21%, el recibo habría batido todos los récords, alcanzado los 92,79 euros.

De seguir así las tarifas, el de julio será el tercer recibo más caro a nivel histórico para el usuario medio. Hasta la fecha, las cinco facturas más elevadas han sido los 88,66 euros del primer trimestre de 2012, los 87,81 euros de enero de 2017, los 83,55 euros de septiembre de 2018, los 82,13 euros de mayo de 2021 y los 81,55 euros de febrero de 2021.