Ferrari se suma a las empresas que abandonan Rusia. La compañía acaba de anunciar que suspende la fabricación de vehículos para el mercado ruso en respuesta a la guerra iniciada por Vladimir Putin contra Ucrania. La empresa controlada por la familia Agnelli ha señalado que estará analizando la situación y cumpliendo las reglas, regulaciones y sanciones

Benedetto Vigna, CEO de la compañía destacó que “Ferrari está cerca de la población ucraniana en este terrible momento histórico” y añadió que “aunque esperamos un rápido retorno al diálogo y una solución pacífica, no podemos quedarnos impotentes ante el sufrimiento de los civiles afectados. Con ellos está nuestro pensamiento y nuestra solidaridad. Estamos listos para hacer nuestra pequeña aportación junto a las instituciones que aportan un alivio al drama humanitario”.

Apoyo a las víctimas de Ucrania

El fabricante de deportivos acaba de donar un millón de euros a la región de Emilia-Romagna que, en colaboración con la Cruz Roja y Acnur, los destinará a proyectos humanitarios internacionales en apoyo de Ucrania y a la acogida de refugiados en la región que es donde está asentada la compañía.

Ferrari también está ayudando a la Asociación Chernobyl de Maranello para apoyar las necesidades de los ucranianos que van a ser alojados en la zona cercana.